Unidos por la abuela romance Capítulo 593

Esta era la mentalidad de la generación anterior. Creían que la herencia debía permanecer en la familia y dejándosela a los hijos y nietos, ya que las hijas solo crecerían para casarse con otra familia. Para las familias sin un descendiente directo para legar la herencia, los habitantes del pueblo estarían observando la propiedad. Mantendrían la riqueza en el pueblo. Muchos no estaban dispuestos a dejar sus bienes ganados con esfuerzo a alguien que no llevaba el nombre de la familia. Por lo tanto, intentarían traer a un hijo a la familia.

"¿Hablas de Juan Rubio por casualidad?" El nombre de Juan me sonaba, ya que en su día fue un alto ejecutivo en una de las subsidiarias de Los Sainz. Juan ganaba un millón de euros al año. Para que Juan ganara una gran cantidad de dinero de Los Sainz, empujara a sus sobrinas y se hiciera cargo de la propiedad de su hermana, la Sra. Sainz no podía decir que dejó una buena impresión. Necesitaba que Mauro fuera duro con Juan para que este último no pudiera ni siquiera ganarse la vida pidiendo en las calles.

"Así es. Mis abuelos lo adoran, ya que es el más prometedor de todos los nietos. Incluso lo nombraron hijo adoptivo de mis padres para que tenga derechos sobre los activos de mis padres. Mi hermana y yo planeamos recuperar la casa de mis padres después de Año Nuevo. ¡Prefiero vender el lugar que dárselo a ellos!" Esto implicaría otro juicio. Aunque el Año Nuevo estaba a la vuelta de la esquina, Celestia aún no había tomado medidas debido al reciente divorcio de su hermana.

La propiedad dejada por sus padres fue construida a principios de los 90. La casa en sí no valía mucho dinero, pero sí la tierra. La residencia fue construida en una tierra de varios cientos de metros cuadrados. Mientras vivían sus padres , compraron tierras de otros y agregaron yardas a su terreno residencial. Mamá les dijo una vez a ella y a Lilia que la tierra se podía dividir en dos para construir dos casas cuando crecieran y salieran adelante. De esa manera, las hermanas se mantendrían cerca para ayudarse y cuidarse mutuamente.

"¡Eso es una tontería! La propiedad de mi hermana debería ser heredada por su hija, no por su sobrino. No te preocupes, Cele. Te ayudaré a recuperar la casa de tus padres. Ah, ¿tienes el título de propiedad de la propiedad?"

"Todo lo que tenemos es un permiso de uso de la tierra, y lo tiene mi hermana. Mi hermana fue lo suficientemente inteligente como para robar el permiso de uso de la tierra cuando nos echaron de la casa". Celestia solo tenía diez años en ese entonces, así que ese era el menor de sus problemas. Estaba desolada por haber perdido a sus padres tan de repente. Todo lo que hizo fue llorar. Gracias a Dios, su hermana estaba allí para ella.

Debido a las noticias populares en Twitter, la Sra. Sainz se enteró del conflicto entre las hermanas y el resto de los Rubio. Sin embargo, el corazón de la Sra. Sainz aún sangraba por las chicas cuando Celestia hablaba del pasado. Una niña de quince años y una de diez no tenían medios para asegurar el pago del seguro de sus padres y los activos contra sus codiciosos familiares. Fueron obligadas a salir al mundo con solo la compañía mutua.

La Sra. Sainz se enteró por su hija de que Celestia se había casado apresuradamente. Al parecer, Celestia tomó ese camino para dar tranquilidad a su hermana y mudarse de su casa.

Otros podrían no entender por qué Celestia hizo lo que hizo, pero la Sra. Sainz sí lo entendía.

Las hermanas solo se tenían la una a la otra durante más de una década, y como hermana mayor, Lilia estaba acostumbrada a cuidar a su hermanita. Aunque Celestia ya era adulta y tenía la capacidad de ganar suficiente dinero para alquilar un lugar, Lilia no se sentía cómoda con eso. La mente de Lilia solo estaría en paz si su hermana se quedaba cerca de ella.