¡Vuelve conmigo,mi cariño! romance Capítulo 555

Justo cuando estaba a punto de conseguirla, de repente, abrió mucho los ojos y miró a Chloe con incredulidad:

—Tú...

Chloe sostuvo el candelabro en su mano y le clavó la nuca con la aguja afilada de la vela.

—¡Maldita mujer, te atreves a clavarme!

Santiago pellizcó el cuello de Chloe con ambas manos y trató de estrangularla ferozmente con mucha fuerza.

Chloe estaba a punto de asfixiarse, pero no se rindió. No podía morir, sino que quería vivir, y vivir limpiamente. Apretó el candelabro en su mano, como si se volviera loca, agotando repetidamente las fuerzas de todo su cuerpo, usando el candelabro para clavar su cuerpo, una y otra vez.

—¡Ah!

Santiago gritó de dolor y los dos hombres que estaban afuera miraron dentro de la habitación y chascando la lengua.

Pensaron que Santiago estaba jugando a tope, así que no lo tomaron en serio.

Sin embargo, Santiago ya estaba dando vueltas en el suelo por el dolor, Chloe le dio dos pinchazos en arterías y siguió sangrando, pensaba que iba a morir, por lo que se acostó en el suelo gritando.

Chloe se levantó tranquilamente, cogió el largo taburete de madera a su lado y le golpeó dos veces en la cabeza de Santiago, quien se desmayó y cayó al suelo quedándose inmóvil.

Las dos personas que estaban afuera se dieron cuenta de que pasó algo raro, pero no se atrevieron a entrar, temiendo ser regañados por haber arruinado el buen momento de Santiago, por lo que pararon en la puerta y preguntaron:

—¿Señor Santiago?

Chloe apretó su ropa, se quedó aturdida sin moverse por un segundo, y gritó hacia afuera:

—Dejad de gritar, ¿queréis arruinar nuestro momento feliz? ¡Largaos!

Los dos hombres se sorprendieron por un momento, y luego chascaron la lengua.

—No espero que esta mujer sea tan goliarda.

Chloe miró la puerta nerviosamente, y exhaló un suspiro de alivio al escuchar el sonido de pasos yéndose. Se apoyó contra la pared y se cubrió el pecho con las manos, su corazón era como un resorte sin frecuencia, golpeando al azar, en ese momento se sintió desesperada, y las lágrimas cayeron por el pánico.

No, ahora no era el momento de llorar, debía intentar escapar.

Después de estar cerrada aquí durante dos días, sabía claramente que aquí originalmente era un alojamiento provisional, no tenía ventanas, sólo quedaba un respiradero en la parte superior. Movió el taburete a la pared, y apiló los dos juntos, los pisó y salió por el respiradero. La altura del respiradero era aproximadamente la misma que la altura de la pared, trepó la pared y logró escapar del alojamiento sin ser descubierta por nadie.

Se deslizó hacia abajo de la pared alta, sus pies aún estaban a cierta distancia del suelo, debido a que la pared era demasiado alta, sus pies no podían tocar el suelo en absoluto, por lo que sólo pudo soltarse y saltar, por suerte era una tierra fangosa húmeda, sólo se manchó de un poco de barro y no estaba herida, en ese momento, sonó ruido en el patio, como si hubieran encontrado su escape.

No tuvo tiempo para pensar demasiado, sólo tenía una idea: escapar de aquí lo más rápido posible. Estaba descalza, corriendo por la montaña sin carretera, por temor a ser atrapada nuevamente, si la volvieran a atrapar, nunca tendría más oportunidad para escapar.

Tenía que usar todas sus fuerzas, las espinas punzantes le provocaron manchas de sangre en sus pantorrillas.

No sabía qué le había herido en el pie, y dio un grito sofocado por el dolor, pero no se paró de correr.

En el templo, Mauricio y los subordinados que persiguieron a Santiago se encontraron, sabían que Santiago había ido al alojamiento provisional detrás del templo. Cuando llegaron allí, al ver a las dos personas sentadas a la puerta, confirmaron que Chloe debía estar encerrada aquí, de lo contrario, no habría guardias en la puerta.

Mauricio llevó a los dos subordinados que perseguían a Santiago y derribó con éxito a los dos guardias de la puerta.

Cristián entró corriendo al alojamiento primero, pero sólo había una mesa allí, y no había nadie más que el desorden, y frunció el ceño con decepción.

Mauricio y Alain entraron después, pero al ver esta escena, era obvio que alguien se había quedado en la habitación, y la puerta de adentro rápidamente les llamó la atención. Cristián se acercó rápidamente, empujó la puerta, pero no pudo abrirla, Santiago la cerró con cerradura desde el interior cuando entró.

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