¡Vuelve conmigo,mi cariño! romance Capítulo 883

De repente alguien llamó a la puerta de la oficina.

Él pretó un poco la mano, luego se calmó.

—Adelante —dijo después de meter la foto en el cajón y abrir un documento.

Ada entró con un documento en la mano.

—Hoy necesitamos usar eso, debe firmar —se le entregó mientras dijo.

Gael lo abrió, impasible en apariencia.

—No te ves bien, ¿te sientes mal? —Ada le preguntó con preocupación sin mencionó ni una palabra sobre lo de ayer.

Gael se quedó callado.

—Gael —ella intentó hablar con él.

—Ya —dijo Gael y le tiró el documento firmado, obviamente no quería escuchar a Ada.

Ada apretó un poco los puños y finalmente aguantó lo que quería decir. —Fundación de Ensueño organizó una fiesta benéfica y le envió a usted una carta de invitación —dijo recogiendo el documento y luego le pasó una carta exquisita.

Este tipo de actividad solía dirigirse a la nobleza y las clases altas, el motivo principal fue proporcionarles una plataforma para hacer propaganda. Ellos ya tenían un estatus, naturalmente, querían también una buena reputación.

Sería una actividad ganar-ganar. Los ricos lograrían la reputación a través de donar dinero y la funtación ayudaría a los necesitados con el dinero donado.

—Ya veo —Gael lo echó un vistazo y le dijo.

—Voy contigo —Ada temía que se negara y dijo—, necesitas una compañera a tu lado en la fiesta.

—Bien —Gael dijo en voz baja, —sigue con tu trabajo.

En el hotel.

Edmundo llamó a la puerta de la habitación de Calessia con una caja en la mano.

Ella llevaba ropa de hogar y un par de lentes para computadora. Escuchó el timbre y dejó su trabajo para abrir la puerta.

—¿Por qué estás aquí? —Al ver que fue Edmundo, le preguntó.

—Por supuesto voy por algo —entró sin permiso de Calessia.

Ella cerró la puerta. —¿Quieres tomar algo? —se quitó las gafas y le preguntó.

—No —Le pasó un vestido y dijo—, prueba este vestido.

—¿Por? —Le miró y preguntó, perpleja.

—Hay una cosa —Él tomó su mano y dijo—, una fiesta benéfica. No tengo compañera, necesitas ir conmigo.

—No tengo tiempo —ella respondió.

—Pase lo que pase, necesitas ayudarme si soy tu amigo —Edmundo se sentó en el sofá y comportó como un niño.

—Me ayudaste mucho, así que acepto echarte la mano esta vez —sin remedio, Calessia recibió el vestido.

—Te sentirás bien ser mi compañera, no soy feo, ¿no? —Edmundo dijo sonriendo.

—Te sientes muy bien contigo mismo —Calessia le respondió.

—¿Entonces quieres decir que soy feo? —Edmundo dijo con una mirada severa.

—Eres guapo, ¿ya estás contento? —entró en el cuarto con el vestido en la mano después de decir eso.

Poco después, salió con un vestido blanco. —¿Me veo bien con este vestido? —preguntó.

—Realmente te conviene, parece que tengo buen gusto. Solo arregla un poco el cabello y ya —Edmundo se quedó sorprendido.

—¿No es necesario maquillarme? —le preguntó.

—También eres atractiva sin maquillaje —Edmundo dijo sonriendo.

—Como el responsable de la empresa, asistes a actividad así por primera vez, necesito ponerme elegante para ti —Calessia le dijo.

Después de un año de esfuerzo, Edmundo se ha convertido en el jefe de la sucursal de la empresa. Tenía capacidad.

—¡Mi compadre! —Edmundo respondió sonriendo, se sentía muy contento.

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