Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1089

‘Aunque ella no me ama, ahora está conmigo, ¿no es así?’.

Ling Yiran solo sentía un gran peso en un lado de su hombro. Parte del peso de él estaba ahora sobre su hombro.

Él era como un hombre exhausto hasta la médula, que buscaba algún soporte, aunque solo fuera temporal.

Ella parecía ser su soporte, su único soporte en este mundo. Si ella lo apartaba, era como si él cayera por un precipicio.

‘Dios, ¿cómo pude tener una idea así?’, pensó Ling Yiran mientras se reía de sí misma. Ella nunca podría ser su único soporte. Era solo una ilusión provocada por su cansancio.

"Bueno... Deberías descansar. Volveré a mi habitación", dijo Ling Yiran mientras trataba de irse.

Sin embargo, con un giro, él de repente la había inmovilizado en la cama antes de que ella pudiera dar un paso.

"¡Déjame ir!". Ella intentó apartarlo, presa del pánico, pero él solo la abrazaba con más fuerza.

"No te haré nada. Solo… voy a abrazarte así." l murmuró, mientras enterraba su rostro en sus hombros, respirando su aroma y sintiendo su temperatura con avidez.

Era como si esa fuera la única forma de llenar el espacio en su corazón, de asegurarle que él podía... irse a dormir...

Ling Yiran se puso rígida porque estaba preocupada de que Yi Jinli pudiera hacerle algo, pero él simplemente la abrazaba... ¡como dijo que lo haría!

Sin embargo, él la sostenía en sus brazos con fuerza, como un niño que sostiene su juguete favorito. Ella no podía liberarse en absoluto.

Además... si ella se liberaba, él probablemente podría usar la fuerza para mantenerla en sus brazos si así lo quisiera.

‘Él dijo que no podía dormir, pero ahora... ¿Él se quedó dormido tan profundamente?’.

Ling Yiran se sorprendió, pero probablemente era algo bueno para ella que él estuviera dormido ahora.

Ella movió su cuerpo con cuidado y suavemente levantó sus brazos. Logró mover la mayor parte de su cuerpo con dificultad.

Solo entonces, ella finalmente podía verlo bien.

Él estaba durmiendo profundamente. De lo contrario, con su estado de alerta, ¡él se habría despertado! ¡Parecía que él realmente estaba teniendo problemas para dormir estos días!

Ella bajó la cabeza para mirarlo mientras dormía. Sus párpados cerrados cubrían esos ojos brillantes y sus largas pestañas añaden belleza a su rostro dormido. Los delgados labios debajo de su nariz perfilada estaban ligeramente cerrados mientras estaban teñidos de un ligero color rosa.