Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1251

"Bueno...". El personal estaba en apuros. Sabían exactamente quiénes eran Hua Lifang y sus amigas.

Sin embargo, esta Señorita Ling debía ser una mujer de clase alta. Después de todo, la acababan de ver llegar en un Bentley, algo que los ciudadanos corrientes no podían permitirse.

Hua Lifang movió sus labios rojos y sonrió. "Yiran, lo siento. Mi amiga es sencilla y odia a las mujeres intrigantes. Como sabes, la alta sociedad odia a las personas intrigantes como tú que están dispuestas a incriminar a otras para alcanzar tu meta. Mi amiga tiene muchas amigas en la alta sociedad. ¡Si publica esto, me temo que esta tienda dejará de funcionar!".

Aunque Hua Lifang estaba hablando con Ling Yiran, sus palabras eran para que el personal de la tienda las escuchara.

Ling Yiran la miró con frialdad. Ella ya le había dicho a Gu Lichen la verdad que quería saber hace dos días.

Sin embargo, a juzgar por la forma en que se comportaba Hua Lifang, estaba claro que ella no lo sabía.

¿Gu Lichen no le había preguntado todavía a Hua Lifang? Sin embargo, ¡ya no tenía nada que ver con ella!

"Hua Lifang, no te expuse antes al hacerte pasar por mí, pero eso no significa que las cosas seguirán de la misma manera. Puedes continuar con tus mentiras, y también pelearé por este caso por mi amigo. Cuando llegue el momento, veremos quién es la mujer intrigante que incrimina a los demás".

Si solo había estado tolerando a su prima debido a su abuela, su paciencia ahora se había agotado.

"Tú...". La cara de Hua Lifang se enrojeció al sentirse culpable. No esperaba que Ling Yiran hablará sobre la falsificación de su identidad en público. Efectivamente, las dos mujeres ricas a su lado y que la habían estado adulando recientemente, mostraron una expresión de querer saber más.

Sin embargo, había tanta gente alrededor que Hua Lifang dijo obstinadamente: "¿Y qué pasa si lo piso? Es solo un estúpido vestido. ¡Puedo pagar por ello incluso si lo piso!".

"¡No te lo puedes permitir!". La voz de Ling Yiran era fría, e incluso sus ojos, normalmente suaves y en forma de almendra, exudaban una intensa aura sombría.

¡Era un vestido que Lianyi le había preparado, y ninguna cantidad de dinero podía compensarlo si se estropeaba!

"Tú...". La cara de Hua Lifang se tornó aún más roja, estaba llena de vergüenza.