Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1438

"No quiero tener nada que ver con él. Además, con mi condición actual, incluso si me someto a un trasplante de hígado, no es seguro que la operación tenga éxito. Aún podría fallar después", dijo Zhuo Qianyun.

Habría tenido muchas más posibilidades de sobrevivir después de un trasplante de hígado si su enfermedad solo estuviera en la etapa uno o dos. Sin embargo, ahora estaba en la etapa tres y era demasiado tarde. Probablemente no sería de mucha utilidad, incluso si la cirugía tuviera éxito.

"Puedo hacer que Jin busque al mejor doctor para operarte", sugirió rápidamente Ling Yiran.

Zhuo Qianyun sonrió suavemente. "Yiran, gracias. Ya has hecho suficiente por mí. No quiero pasar los últimos meses de mi vida postrada en una cama de hospital. Si me operan, es posible que quede atrapada en el hospital hasta el final".

"Pero—".

"No quiero desperdiciar estos meses. La cirugía no significa mucho para mí ahora", espetó. Sabía que su condición empeoraba día a día. En ese caso, ¿para qué molestarse con eso?

Ling Yiran sabía que la Hermana Zhuo había aceptado su destino, o más bien... era debido a la dificultad de la operación y el rechazo que sentía por Ye Wenming.

"Hermana Zhuo, tienes al Pequeño Yan y a la Tía. ¿Estás dispuesto a renunciar a ellos?", preguntó Ling Yiran.

¡El destino a menudo le había dado esperanza antes de darle una decepción fatal en el pasado!

La Señora Zhuo se había quedado sin palabras, no sabía cómo persuadir a su hija de repente. Al contrario, ¡ella también compartía los mismos miedos que su hija!

Durante los siguientes días, en lugar de instalar el puesto de comida, Zhuo Qianyun llevó al Pequeño Yan al jardín de niños todos los días. También acompañaba a su madre en casa y visitaba el hospital periódicamente.

La vida era sencilla, pero ella se sentía más satisfecha que nunca. Quizás esta era la única vez en su vida que finalmente podía quitarse el peso de sus hombros y vivir tranquilamente la vida que le gustaba. Podía acompañar a su madre al mercado, hacer una buena comida en casa y usar su teléfono para recopilar las fotos de su hijo en un álbum digital...