Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 1823

Gao Manlin miraba con frialdad a Bai Tingxin, quien estaba sufriendo frente a ella. A pesar de que el hombre que la convirtió en el hazmerreír y arruinó a la familia Gao sufría mucho en este momento, ella no se sentía feliz por eso.

Lo que ella sentía era tristeza.

¡El hombre estaba dispuesto a soportar este dolor inhumano por Qin Lianyi! Esta maldición de sangre era solo contra Qin Lianyi. Si hubiera estado dispuesto a elegir a cualquier otra mujer en el mundo, no tendría que soportar el dolor de levantar la maldición de la sangre. ¡Sin embargo, él preferiría arriesgarse a morir para poder estar con Qin Lianyi!

Pero, ¿y qué había de ella? ¡Todos estos años habían sido en vano!

'¿Qué tiene de bueno Qin Lianyi para hacer que un hombre como Bai Tingxin haga tanto por ella? La mujer es normal y corriente. Nunca ha hecho nada especial, ¿verdad?’.

"Bai Tingxin, ¿vale la pena sufrir por Qin Lianyi? ¡Ella ni siquiera sabe que estás sufriendo!". Gao Manlin caminó hacia Bai Tingxin, se agachó y dijo: "Si no puedes sobrevivir esta noche, morirás. Incluso si mueres, probablemente ella no derramará una lágrima por ti. Ella siempre pensará en ti como el hombre que la abandonó".

Era como si provocarlo de esa manera la hiciera sentir mejor.

Bai Tingxin levantó la cabeza con dificultad debido al dolor. Sus ojos parecían aturdidos, pero aún jadeaba. Dijo con una voz extremadamente ronca: "Si yo... muero, la familia Gao... tampoco podrá vivir. No necesito que te preocupes por... cuánto... sufro por Lianyi... ."

Mientras fuera por Lianyi, ¿por qué no valdría la pena?

¡Lianyi ya era su todo!

...

Qin Lianyi no tenía idea de cuánto tiempo permaneció en el coche. Solo vio el cielo iluminarse, y su corazón se hundió hasta convertirse en un profundo abismo sin fondo.

Qin Lianyi solo pensaba que su pecho se sentía apretado. ¡La mirada en los ojos de Gao Manlin parecía confirmar su especulación!

Cogió su teléfono, queriendo llamar a Bai Tingxin. Sin embargo, en el momento en que levantó su teléfono, hizo una pausa.

'¿Qué le voy a preguntar? ¿Qué más hay que preguntar? Gao Manlin saliendo de la mansión de Bai Tingxin a esta hora ya es la mejor prueba’.

'¿Es esto esa cosa tan importante que Bai Tingxin quería decirme? Pues sí, de verdad es... ¡Importante!’.

Tal vez debería alegrarse de que Gao Manlin hubiera entrado primero en la mansión. De lo contrario, anoche habría sido el momento más vergonzoso de su vida.

No era demasiado tarde para que ella volviera a encarrilar su mente. Al menos no había puesto todos sus sentimientos. Al menos todavía podría recuperarlos...