Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2036

Zhuo Qianyun apretó los labios. Sabía lo que le preocupaba a su madre, pero... "Mamá, ahorraré suficiente dinero para mi jubilación. El Pequeño Yan también es un niño filial. Él me cuidará cuando sea vieja, así que no tienes nada de que preocuparte".

"Qianyun, dime la verdad. ¿Tú... todavía sientes algo por Ye Wenming? ¿Él es la razón por la que no puedes seguir adelante?", preguntó la Señora Zhuo.

Zhuo Qianyun se quedó en silencio. Ye Wenming era como una marca permanente para ella. Aunque ahora no sentía nada por Ye Wenming, todavía no podía olvidarlo.

Después de todo, él fue una parte muy importante de su vida. ¡Él fue incluso quien hizo que no pudiera amar a alguien!

Ella no se atrevía a iniciar una nueva relación. ¡Un gato escaldado del agua fría huye!

"Mamá, es cierto que no puedo olvidar lo que sucedió en el pasado, pero ya no amo a Ye Wenming. Eso lo sé mejor que nadie. ¡Manejar un pequeño negocio como este y estar contigo y el Pequeño Yan es la vida que quiero!".

La Señora Zhuo suspiró y no dijo nada más.

...

En la oficina de registro de matrimonio, Qin Lianyi y Bai Tingxin completaron sus formularios de registro, se tomaron fotos y estaban esperando para hacer sus votos. Solo podían obtener su licencia de matrimonio después de hacer sus votos.

Sin embargo, Qin Lianyi podía sentir los ojos de muchas personas mirándola y a Bai Tingxin mientras esperaban.

Después de todo, ella tenía una gran barriga y Bai Tingxin era atractivo.

Muchas novias y novios que también estaban esperando para hacer sus votos los estaban mirando y susurraban entre ellos de vez en cuando.

Qin Lianyi también le susurró a Bai Tingxin: "Cuando los tabloides informen sobre nuestro matrimonio, ¿crees que todos dirán que fuiste obligado a casarte conmigo porque estoy embarazada?".

Qin Lianyi lo dijo en broma y no lo pensó demasiado.

De ahora en adelante, ella era su esposa, y él era su esposo...

"¡Tingxin, te amo!", le dijo Qin Lianyi a Bai Tingxin mientras miraba la licencia de matrimonio en sus manos al regresar al coche.

"¿Cómo deberías llamarme ahora?", preguntó Bai Tingxin con una sonrisa.

Qin Lianyi se congeló. Luego, reaccionó y dijo: "...Cariño". Aunque ya lo había aceptado como su esposo, todavía se sonrojó cuando esa palabra salió de su boca.

"Buena chica, querida", dijo Bai Tingxin mientras se inclinaba. Levantó suavemente la barbilla de Qin Lianyi con una mano y sus delgados labios la besaron en los labios.

"No importa lo que pase en el futuro, te daré mi todo mientras me llames 'cariño'", dijo con voz ronca. Era como si no pudiera besarla lo suficiente.

"También puedo darte mi todo. No importa lo que pase en el futuro, debemos ser honestos y no tener malentendidos, ¿de acuerdo?", murmuró Qin Lianyi.