Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2270

"Solo podremos saberlo después de un examen completo en el hospital". El policía ayudó rápidamente a Zhuo Qianyun y Ye Wenming a subir al coche mientras hablaba.

En el coche, Ye Wenming todavía estaba preocupado por Zhuo Qianyun. "¿Estás bien?". Sin embargo, su voz sonaba ronca. Incluso decir una oración simple era difícil para él.

Zhuo Qianyun sacudió la cabeza, sus lágrimas aún fluían.

Ye Wenming levantó la mano y le secó suavemente las lágrimas. "No llores... Qianyun. Deja de llorar. Ya no hay peligro, y no dejaré que esto te vuelva a pasar".

Él pensaba que ella estaba llorando porque estaba asustada. No tenía idea de que ella estaba llorando porque le dolía el corazón.

¿Desde cuándo comenzó a dolerle el corazón por las heridas que él sufrió por ella?

"Ye Wenming, ¿por qué lo hiciste? ¿Por qué te cortaste el cuello cuando el Señor Yu te lo pidió? ¡Yo... no soy tan importante!".

Él dijo: "No depende de ti determinar si eres importante para mí o no. Depende... de mí. Además, si no hubiera hecho lo que me dijo, entonces... el Señor Yu tampoco habría bajado la guardia".

"Deja de hablar. El sangrado solo empeorará si sigues", dijo Zhuo Qianyun apresuradamente.

"Está bien, yo... no hablaré. Tú tampoco deberías hablar...", dijo él porque ella también tenía heridas en el cuello.

El coche inmediatamente se quedó en silencio.

Las manos de Zhuo Qianyun y Ye Wenming estaban entrelazadas. Ahora era difícil saber quién estaba sosteniendo la mano de quién.

Ella tenía muchas dudas en la cabeza. Por ejemplo, ¿cuándo le insinuó Ye Wenming a los hombres del Señor Yu? ¿Fue cuando uno de ellos le entregó la daga?

Ye Wenming solo sintió que sus párpados se caían cada vez más. Su cuerpo también se estaba volviendo cada vez más frío. Hacía tanto frío que parecía que no podía aguantar más y estaba a punto de quedarse dormido.

'Al menos Qianyun está a salvo por ahora’.

'Al menos, hice lo que prometí. Yo... la protegí a ella y al bebé’.

'Así que déjame dormir un rato. Solo un poco de tiempo…’.

'Es genial que Qianyun y el bebé estén a salvo...'.

Ye Wenming perdió el conocimiento y se desmayó. Nunca pudo ver la mirada de preocupación en los ojos de Zhuo Qianyun ni escucharla gritar a pesar del dolor en su cuello: "¡Wenming!".