Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 2532

En su mano había un brazalete que Nanting le había dado antes de irse.

En ese momento, él le había dicho: "Xia Xi, no creo que vaya a tu boda. Este es mi regalo de bodas para ti. Espero que seas la novia más hermosa del momento".

'Novia... Sí, algún día seré una novia y... me pondré este brazalete'.

"Nanting...", murmuró Xia Xi mientras sus ojos se humedecían de nuevo.

Sin embargo, una voz de repente sonó en sus oídos. "¿Qué pasa? ¿Extrañas tanto a Gong Nanting? ¿Te casarías con él si estuviera vivo?".

Xia Xi se congeló e instantáneamente miró a Su Zhehan, quien se había parado frente a ella hace un momento. Estaba vestido con traje y corbata, se veía elegante y noble. Sin embargo, su apuesto rostro estaba sombrío.

"Sí. ¡Me casaría con Nanting en un santiamén si él todavía estuviera vivo!", ella respondió sin dudarlo. Ella solo lamentaba que el hombre que la amó profundamente había perdido la vida tratando de protegerla.

¡Ella fue la que debió haber muerto primero!

Su declaración pareció haber provocado a Su Zhehan, cuyo rostro se volvió cada vez más sombrío a medida que se acercaba a ella. Él dijo: "Parece que eres apasionadamente devota a él. Es mi culpa haber sido un obstáculo entre ustedes dos".

Xia Xi frunció el ceño. "Su Zhehan, ¿qué estás tratando de hacer?".

'Sí, ¿qué estoy tratando de hacer?'. ¡Incluso Su Zhehan no tenía idea de lo que estaba tratando de hacer!

Él solo la vio parada allí, por lo tanto no pudo evitar salir del coche para caminar hacia ella. Luego, los celos llenaron su pecho cuando la escuchó murmurar el nombre 'Nanting'.

"¿Acaso Gong Nanting te dio ese brazalete?", gritó él.

Xia Xi se congeló y su expresión se puso rígida.

Su Zhehan instantáneamente supo que tenía razón. Los celos en su corazón se extendieron por todo su cuerpo.

Al momento siguiente, hizo algo más allá de sus expectativas. Le arrebató el brazalete de la mano.

"¿Qué estás haciendo?". Xia Xi se sorprendió e intentó agarrar el brazalete, pero ya era demasiado tarde. Su Zhehan ya tenía el brazalete y la mano de ella no lo alcanzó.

"¿Cuál es el problema? ¿Te importa tanto lo que te ha dado Gong Nanting?", preguntó Su Zhehan con frialdad.