Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 314

Cuando le dijo a ella que él era un bastardo, ella sonrió alegremente. "¿Y qué si eres un bastardo? Tú eres lo que eres. Solo hay un tú en este mundo. Lo que una persona puede lograr no se basa en si nació fuera del matrimonio".

"¿No crees que es vergonzoso que yo haya nacido?".

Ella dijo con seriedad: "Creo que tus padres son irresponsables con el matrimonio. Ahora que tienen hijos, deberían casarse. Si no pueden casarse, deberían haber mantenido la distancia o tomado precauciones. ¿No hay un dicho que dice que tener una relación sin considerar el matrimonio es solo acoso sexual?".

Por primera vez, alguien dijo eso de sus padres delante de él.

¿Sabía ella que a veces las personas entran a una relación sin considerar el matrimonio porque hay muchas otras consideraciones?

El matrimonio no era más que elegir a la mujer que podía ayudarles a sacar el máximo provecho.

"¿Te metes en una relación para casarte?", preguntó él.

"Por supuesto", respondió ella. "Si quiero casarme en el futuro, seguramente encontraré a un hombre al que ame mucho y a alguien que me ame mucho. Nos amaremos el uno al otro para siempre. Tal vez después de mucho tiempo, ese amor romántico se convertirá en amor familiar, pero no importa qué, él y yo vamos a permanecer juntos y envejeceremos juntos...".

Ella le describió su idea del amor y del matrimonio.

Él escuchó e inesperadamente produjo una especie de anhelo. Él estaba casi deseando poder tener una relación como esa también.

Él siempre había asumido que le era indiferente su futuro matrimonio. Si se casaba, él pensó que sería con una mujer que podría traerle algún beneficio. De lo contrario, él no se casaría.

Sin embargo, su corazón se aceleró ante sus palabras.

Si ella fuera la persona con la que él se iba a casar... Entonces él lo haría voluntariamente, y él esperaba con ansias el día en que envejecieran juntos.

Fue como un martillo, golpeando con fuerza contra su corazón, haciéndolo temblar.

¿Sabía ella el verdadero significado de las palabras ‘Muy bien’?

Mientras él la miraba fijamente, los párpados de ella comenzaron a cerrarse. Luego, las manos que habían estado descansando sobre la cara de él comenzaron a deslizarse lentamente hacia abajo y rodearon su cuello. "Me está dando un poco de sueño. No he... uh, dormido mucho anoche. Tomaré una siesta ahora... Despiértame cuando sea hora de cenar".

Él no sabía si reír o llorar. Incluso ahora, ¿ella todavía se acordaba de comer?

Después de un tiempo, Qin Lianyi se quedó dormida.

Bai Tingxin frunció sus delgados labios y finalmente levantó a la persona frente a él. Él fue a su habitación y la dejó cuidadosamente sobre la cama.