Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 326

Además, como jefa, se ocupaba de la caja registradora, servía los platos, limpiaba las mesas, y parecía hacer un poco de todo. Cuando el negocio estaba ocupado, ella no tenía tiempo para nada.

Sus habilidades podían ser limitadas, pero le daba a su hijo lo mejor que podía dar.

Aproximadamente a las tres de la tarde, el restaurante recibió otro pedido, que incluía panes de piña y té con leche.

Fue solo cuando Ling Yiran vio la dirección que se distrajo.

"¿Cuál es el problema? ¿Hay algún problema?". Zhuo Qianyun había preparado el pedido para Ling Yiran solo para encontrarla mirando fijamente el recibo del pedido.

"No es nada", respondió Ling Yiran, tomando los panes de piña y el té con leche.

La dirección de la orden era claramente el bufete de abogados en el que había trabajado anteriormente. Ahora que iba a entregar comida allí, naturalmente se encontraría con sus antiguos colegas.

En ese entonces, ella era una persona tan espléndida en la oficina. Quizás en un momento, se sentiría muy avergonzada.

Ling Yiran sintió una pizca de amargura en su corazón, pero ahora que había elegido esa industria, esas situaciones eran inevitables.

Además, la vida era tan larga que siempre te encontrarías con personas que habías conocido antes. Solo porque había estado en prisión y estaba desamparada, ¿no podría enfrentarse a esas personas?

‘¡Solo tengo que acostumbrarme!’ pensó para sí misma, luego puso la comida en la bicicleta eléctrica y se fue.

Cuanto más se acercaba al bufete de abogados, más familiares se volvían los caminos para ella. Cuando Ling Yiran llegó a la entrada del bufete de abogados, estacionó la bicicleta eléctrica y miró el moderno edificio.

Cuando llegó por primera vez a ese edificio, había estado tan animada que pensó que con suficiente experiencia, ¡algún día crearía su propio bufete!

Sin embargo, ahora, todo parecía insustancial.

Ling Yiran solo se alegró de no haber visto a muchos de sus antiguos colegas, por lo que fue menos incómodo para ella.

Ya eran más de las diez de la noche cuando Ling Yiran regresó a la Residencia Yi después de un largo día de trabajo.

Ling Yiran quería ir directamente a su habitación, pero recordó lo que Yi Jinli había dicho antes, así que llamó a su puerta cuando pasó por la habitación de Yi Jinli.

Como él quería que ella le diera las buenas noches, ¡que así fuera!

Momentos después, la puerta se abrió y Yi Jinli se paró junto a la puerta, mirando a Ling Yiran. "Estás de vuelta".

"Sí. Bueno... Buenas noches", dijo ella, dándose la vuelta para regresar a su habitación.