Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 327

Sin embargo, el brazo de ella fue atrapado al momento siguiente. Luego, con un tirón, cayó en un amplio abrazo.

Inconscientemente, ella quería separarse de sus brazos, pero sus manos la rodearon y la acercaron más.

"¡Qué buenas noches tan indiferentes, Hermana!", murmuró él mientras sus labios estaban cerca de su oído.

El cuerpo de ella se estremeció un poco y podía sentir su respiración en sus oídos. Todo su cuerpo parecía estar envuelto en su aliento.

"Tú... Déjame ir", dijo ella con la cara enrojecida.

"¿Por qué no me cuentas primero sobre tu primer día en tu nuevo trabajo?", preguntó él.

"Es solo un trabajo de reparto normal. Alguien pide algo y yo simplemente se lo entrego", dijo ella, sintiendo que su corazón latía cada vez más rápido. Incluso su flujo sanguíneo era mucho más rápido.

"¿Es así? ¿Tuviste una buena comida hoy?". La voz de él sonó una vez más en su oído.

"Sí, comí con la jefa. Ella proporciona dos comidas al día". El rostro de ella se estaba calentando como si fuera a arder. La extraña sensación la hizo entrar en pánico. Todo lo que quería ahora era que él la dejara ir.

Sin embargo, él no le dio lo que ella quería. Le volteó la cara para que estuviera frente a él.

"¿Estás nerviosa?", dijo él de repente.

"No… no". Ella lo negó.

"Tu cara está tan roja". Él se rio suavemente. Luego, se inclinó y presionó suavemente sus labios contra la mejilla de ella. "¿Te estás sonrojando por mi culpa?".

¿Qué le pasaba a ella? A menudo él la abrazaba así, pero su reacción fue completamente diferente a las de antes.

Al principio, ella lo consideraba como su familia. Después de conocer su verdadera identidad, ella comenzó a tenerle miedo y temblaba cuando la abrazaba. ¿Y ahora? ¿Qué era eso?

¿Podría ser que… ella se había enamorado de él y sentía algo por él?

¡No, era poco probable!

Sacudió la cabeza y trató de no pensar en eso. Ella y Yi Jinli nunca llegarían a ningún lado.

Hombres como Yi Jinli eran impredecibles. Nadie podía adivinar lo que estaba pensando. Podría parecer que estaba enamorado de ella ahora, pero ¿cuánto duraría esa ilusión?