Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 354

"Pensando en...". Ella de repente se estremeció, sus ojos mirando directamente a la persona frente a ella. Ahora que lo pensaba, Bai Tingxin era ahora el patriarca de la Familia Bai. Por supuesto, tendría sus contactos y conexiones. Si Bai Tingxin la ayudaba a investigar el caso de Yiran, sería más fácil obtener pistas útiles.

Con eso, la luz en sus ojos se volvió más brillante. Miró a Bai Tingxin como si estuviera mirando un pan recién horneado.

"Bueno... Sé que te hice mal y admito todo lo que dijiste. Te prometo que haré lo que quieras, pero... ¿puedes hacerme un pequeño favor mientras estamos saliendo?". Qin Lianyi lo miró con esperanza.

"¿Un favor?". Bai Tingxin estaba un poco sorprendido. "¿Qué 'pequeño favor' quieres que te haga?". A juzgar por su mirada aduladora, probablemente no era tan pequeño.

"Bueno, mi amiga Yiran, la que vino a buscarme con Yi Jinli el otro día... Fue condenada erróneamente por un crimen y pasó tres años en prisión, pero en realidad fue agraviada. Simplemente nunca encontramos evidencia para ayudarla a revertir el caso. Ha habido algunas pistas últimamente. ¿Puedes por favor seguir estas pistas y ver si puedes encontrar algo que ayude a revertir el caso?", dijo Qin Lianyi.

Bai Tingxin no esperaba que su favor fuera ayudar a Ling Yiran.

"Ella está en buenos términos con Yi Jinli. ¿Por qué en lugar de pedirle ayuda a Yi Jinli para revertir el caso, ella te pide a ti que pases por tantos problemas?".

"Oye, Yiran no sabe que te estoy pidiendo ayuda. No le pidió a Yi Jinli porque...". Qin Lianyi hizo una pausa. Después de todo, era un asunto privado de su mejor amiga, y la relación actual de Yi Jinli con su mejor amiga era bastante complicada. Terminó diciendo: "No creo que le gustaría pedirle ayuda a Yi Jinli con el caso. Después de todo, se declaró que había estado conduciendo ebria y había matado a la prometida de Yi Jinli, Hao Meiyu".

Bai Tingxin entrecerró los ojos y de repente se rio entre dientes.

"¿De qué te ríes?". Qin Lianyi frunció el ceño.