Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 723

Sin embargo, después de encontrar a Hua Lifang, él no le dio los vestidos.

No sabía por qué. Al igual que el pequeño brazalete de plata, él tampoco se lo dio a Lifang.

Era como si una vez que se los diera a Lifang, todos sus años de extrañarla llegarían a su fin.

'¿Qué diablos está... pasando?'.

Durante dos días, todo lo que él podía pensar era en el comentario que ella hizo el otro día cuando le dolía la cabeza.

‘¿Eso realmente fueron disparates?’.

Las marcas rojas en su muñeca se habían desvanecido, pero la sensación de ser agarrado parecía quedarse allí.

"¡Ling Yiran, dime cuál es la verdad!", murmuró Gu Lichen mientras sus manos se envolvían suavemente alrededor del largo vestido púrpura que colgaba en el armario.

Era como si estuviera abrazando al amante más íntimo...

...

"¡Ah!". Ling Yiran se despertó sobresaltada. Lo que le pegó sus ojos era la oscuridad, pero cuando se tocó la frente, todo era sudor frío.

Ella había estado soñando de nuevo. En el sueño, la niña cargaba al niño en su espalda mientras caminaba por la colina. Ella incluso podía sentir la lucha de la niña.

Sin embargo, la niña en su sueño perseveraba como si no fuera a dejar al niño sin importar nada.

Recientemente, los sueños parecían suceder cada vez con más frecuencia, y las escenas de los sueños eran como ver una película, cambiando cada vez.

‘¿O el sueño es realmente un recuerdo olvidado?’.

De repente, como si sintiera que algo andaba mal, Ling Yiran encendió la lámpara de la mesilla de noche y miró el espacio a su lado.

‘Jin. ¿Dónde está?'.

Cuando llegó allí, efectivamente, la luz del salón de duelo estaba encendida.

‘¿De verdad está ahí?’, pensó Ling Yiran mientras el paso de sus pies se aceleraba.

Cuando ella llegó a la puerta principal, la abrió y miró hacia el pasillo. Lo que vieron sus ojos almendrados fue la foto en blanco y negro que colgaba directamente sobre el pasillo.

‘¡Es la foto del padre de Jin!’.

Los ojos de este hombre estaban llenos de dulzura. Él debería haber tenido una presencia imponente, pero terminó muriendo de frío en el hielo y la nieve.

Quizás él solo quería morir.

Fue abandonado por la mujer que más amaba, por lo que perdió las ganas de vivir.

Ling Yiran simpatizaba con el hombre, pero también sentía una ola de ira subyacente.