Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 786

"¿Por qué?". Ella se preguntó. Él no tenía que meterse en este problema para nada.

Además, en términos de negocios, el negocio de la familia Bai ahora había comenzado a extenderse a la Ciudad de Shen, y debería ser el momento para que ellos establezcan una buena relación con Yi Jinli. Si él ofendía a Yi Jinli, entonces el desarrollo del negocio de la familia Bai en la Ciudad de Shen se volvería difícil.

"¿Me creerías si te dijera que no me importa a quién ofendas?", él preguntó mientras la miraba fijamente.

Por un momento, Qin Lianyi sintió que su mente estaba en trance, como si algo saliera de su corazón.

'¿Qué parte de lo que él está diciendo es verdad y qué parte es falsa?’.

'Sin embargo... ahora parece que estoy tentada a creerle'.

...

Al escuchar el informe del mayordomo, Gao Congming supo que Qin Lianyi y Bai Tingxin, que estaban afuera, se habían ido. Su expresión por fin pareció un poco mejor.

¡Qué problema hoy! ¡Todos se estaban uniendo al problema!

Sin embargo, una de las mayores preocupaciones de Gao Congming en ese momento era su jefe, que había estado en la cocina durante tres horas completas después de regresar.

Él simplemente estaba parado frente al pastel a medio terminar, mirándolo y haciendo que la gente se preguntara en qué estaba pensando.

Gao Congming tampoco entendía por qué el Joven Amo Yi, que obviamente amaba tanto a Ling Yiran, había terminado repentinamente con ella hoy.

'¿Es por... la psiquiatra de antes que los hizo discutir?’.

'¿O... hay algo más?'.

Sin embargo, él sabía en su interior que cualquiera que fuera la razón, no le correspondía a él, como subordinado, preguntar.

"Sí. De hecho, ha pasado algo de tiempo", murmuró Yi Jinli antes de continuar comiendo el pastel bocado a bocado.

Era como una especie de ritual.

El resto del discurso de Gao Congming parecía quedarse atascado en su garganta y no pudo pronunciar una sola palabra más.

El tiempo pasó poco a poco y Yi Jinli finalmente se comió todo el pastel. "Congming, dime. ¿Hay alguien que pueda controlar mi vida o mi muerte?".

"¿Eh?". Gao Congming estaba asombrado, no esperaba que su jefe le preguntara algo así de repente. "Por supuesto... que no".

"Yo también lo creo. No puede haber", dijo Yi Jinli.

‘Por lo tanto, necesito dejar de extrañar y de pensar en esa mujer. Justo como si nunca la hubiera amado’.