Adicto a amarte: La esposa condenada del Jefe paranoico y dominante romance Capítulo 897

Ye Wenming una vez más se sintió sin aliento al pensar en Zhuo Qianyun.

"¡No!". Él rechazó sin pensar. "El matrimonio debería ser un acontecimiento feliz. ¡Un diamante en forma de lágrima suena siniestro!".

Al escuchar eso, Kong Ziyin no pudo decir nada más. Ella simplemente dijo: "Bueno... Veamos otra cosa, entonces. Wenming, ¿qué tipo de anillo de bodas te gusta?".

"Ya veremos. ¿Por qué no nos tomamos nuestro tiempo para elegir el anillo después de anunciar la fecha de la boda?", dijo Ye Wenming.

Al escuchar eso, un toque de decepción brilló en los ojos de Kong Ziyin, pero ella logró poner una sonrisa comprensiva. Ella dijo: "Entonces nos tomaremos nuestro tiempo para elegir el anillo después de anunciar la fecha de la boda".

Kong Ziyin luego eligió otro par de aretes de diamantes antes de salir de la joyería con Ye Wenming.

"Pídele al conductor que te lleve a casa más tarde", dijo Ye Wenming.

"¿Qué hay de ti?". Kong Ziyin estaba sorprendida.

"Tengo algunas cosas de las que ocuparme. Te llamaré más tarde", dijo Ye Wenming.

Kong Ziyin solo pudo asentir, pero cuando entró al coche, preguntó con nerviosismo: "Wenming, ¿de verdad vamos a fijar la fecha de nuestra boda… para ese día?".

"¿Qué pasa? ¿No dijiste que era un día propicio? Los ancianos ya hicieron sus planes, así que, por supuesto, lo fijaremos para ese día", dijo Ye Wenming.

'Sí, los ancianos de nuestras familias lo han confirmado. ¡No tengo nada de qué preocuparme!’.

‘¡Me casaré con Wenming y me convertiré en la señora de la familia Ye!’.

Kong Ziyin sonrió, respondió gentilmente y se subió al coche.

'La fecha de la boda está fijada para dentro de seis meses. Conseguiré todo lo que quiero... en seis meses’.

‘¿Las mujeres son tan sentimentales?’.

Si hubiera sido alguien más llorando, él no hubiera tenido paciencia, pero las lágrimas de ella solo lo harían sentir angustiado.

Incluso entonces... él se había acercado deliberadamente a ella. Todo fue solo una mentira.

Él pensó que él y ella nunca tendrían hijos.

Sin embargo, más tarde, ella le dijo que estaba embarazada.

'¿Embarazada?'. Aunque sabía que era imposible, él sintió una punzada en el corazón en el momento en que lo escuchó.

‘Hijos... ¡Ella y yo nunca tendríamos hijos! ¡Incluso tomé precauciones todo el tiempo!’.