Amor después del matrimonio romance Capítulo 623

Theo no respondió. En su lugar, se puso de pie y caminó hacia la izquierda de Yvonne.

A su izquierda estaba la cama.

Yvonne no sabía lo que iba a hacer, así que lo miró sin hablar.

Luego, Theo se acostó en el costado de la cama y la empujó para que durmiera en el centro.

Yvonne se movió hacia adentro sin notar que Henry estaba detrás de ella. Se movió a sus brazos sin darse cuenta.

El cuerpo de Yvonne se tensó cuando sintió su pecho detrás de ella.

Comprendió que Theo estaba tratando de unirlos a los dos.

"Theo...".

Theo fingió no escuchar su llamado. Cerró los ojos y se durmió.

Yvonne estaba indefensa y no se atrevió a moverse. Si lo hacía, tocaría al hombre detrás de ella.

Sin embargo, Henry de repente se rio en voz baja. "Theo obviamente quiere que nos reconciliemos".

Yvonne no respondió.

Henry prosiguió: "Theo quiere una familia completa".

"¿En serio? ¡No lo creo!". Las emociones en los ojos de Yvonne eran incomprensibles.

Henry de repente estiró su brazo y lo puso en su cintura para abrazarla.

Yvonne estaba tan sorprendida que casi se levanta. "¿Qué estás haciendo?".

"¡Shh!". Henry le indicó que se callara. "Habla en voz baja porque Theo está dormido. No te preocupes, no te tocaré. Solo quiero abrazarte. Theo quiere que nos reconciliemos, ¿tienes el corazón para decepcionarlo?".

Yvonne se congeló y su voz se volvió un poco más suave, "Hmph. ¿Crees que no sé lo que tramas? Deja de usar a Theo como excusa y baja las manos".

Henry no la soltó.

Yvonne arqueó las cejas y trató de quitar la mano de Henry.

Pero antes de que ella pudiera tocar su mano, él se dio la vuelta y la tomó de la mano.

"Tú...".

"Suficiente, vas a despertar a Theo". Henry le recordó.

Yvonne miró a Theo, quien realmente abrió los ojos.

"Theo", gritó Yvonne.

Theo bostezó. "¡Duerme!".

Yvonne vio sus ojos somnolientos y supo que realmente quería dormir. Así que dejó de discutir con Henry y esperó a que Theo se durmiera para quitar su mano.

Sin embargo, se quedó dormida.

Henry miró su rostro dormido y sonrió en silencio.

Solo podía hacer esto cuando ella estuviera dormida.

Henry levantó la manta y cubrió a Yvonne. Luego apoyó la parte superior de su cuerpo y la besó en la frente. "Buenas noches".

Después de decir eso, apagó la luz de la habitación y la abrazó antes de dormir.

Al día siguiente, Henry fue despertado por una llamada telefónica.

Tomó su celular y colgó inmediatamente porque no quería despertar a la madre y al hijo.

Cuando comprobó que no estaban despiertos, suavemente quitó la mano de la cintura de Yvonne, se vistió y se levantó de la cama. Salió al balcón y llamó al número.

La llamada telefónica era de Joe. El respondió rápidamente.

"Señor Lancaster".

"¿Qué pasa?". Henry apretó el puente de su nariz.

Henry explicó: “Muchas personas en esa organización han sido infectadas con el virus, el ejército quiere arrestarlos a todos, lo que significa que los infectados también serán arrestados. No pueden garantizar que no te infectarás, aunque uses la ropa protectora, por lo que no puedo permitir que corras ese riesgo".

Yvonne se conmovió cuando escuchó eso y ya no estaba molesta, pero la expresión de su rostro permaneció mientras preguntaba: "¿Qué hay de ti? ¿Vas a ir?".

"Iré y echaré un vistazo".

"No. ¿Qué pasa si te infectas?". Yvonne frunció el ceño cuando escuchó que él sí iba, y le pidió que no fuera. Ella lo detuvo rápidamente.

Henry sonrió. "No te preocupes, estaré bien. Voy a reunirme con los jefes militares y no estaré en contacto con esos soldados, así que no me infectaré. Pero tú quieres ir para presenciar el arresto de Jacqueline, así no te dejaré ir".

Yvonne se quedó sin palabras después de escuchar eso.

Él tenía razón. Quería ir a presenciar el arresto de Jacqueline con sus propios ojos.

Lo más probable era que entrara en contacto con esos soldados, y ellos tendrían contacto directo con las personas de la organización. Podían estar infectados o no.

Pero el personal militar de alto nivel era diferente. Solo daban órdenes de arresto. No hacían el trabajo personalmente, por lo que no se infectarían.

Yvonne se sintió aliviada al pensar en ello.

Ella suspiró. "Bueno, no iré, pero debes tener cuidado de no entrar en contacto con esos soldados".

Mientras Henry se cambiaba de ropa, le respondió: "Lo sé, me alegro de que te preocupes por mí".

Yvonne volvió la cabeza y su expresión era extraña. "¿A quién le importas? Solo me preocupa que puedas estar en contacto con esos soldados y posiblemente infectar a Theo, Frederick y Sue".

"¿Y qué hay de ti?". Henry la miró. "¿Por qué no te tomas en cuenta? Si me infecto, ¿no crees que volveré y te contagiaré?".

Yvonne hizo un puchero. "Ve a bañarte. Volveré a mi habitación".

Inmediatamente después de decir eso, caminó hacia la puerta.

Henry la miró mientras se marchaba. Sonrió mientras la miraba con ternura.

Esta mujer obviamente se preocupaba por él en su corazón, pero se negaba a admitirlo.

Se preguntó cuándo cambiaría su comportamiento y lo admitiría.