Amor, Dulce Amor romance Capítulo 84

Después del desayuno, Sigrid se quedó en el baño durante cinco minutos y al salir vio que George se había puesto el suéter.

"¿Vamos a salir?", preguntó Sigrid. Ella estaba confundida. Aunque había leído el itinerario de lo que harían, no lo había memorizado y nunca recordaba lo que iba a hacer en un día específico.

George asintió y dijo: "Te llevaré a comer comida deliciosa en el almuerzo".

Cuando Sigrid escuchó que habría comida deliciosa, sus ojos se iluminaron. Sus seductores ojos estaban llenos de emoción, e incluso la forma en que ella comenzó a hablarle fue mucho más suave. "Entonces espérame. Me cambiaré de ropa".

Ella pensó en qué ponerse, y llevó su suéter de cuello alto y sus pantalones gruesos al baño.

George se sintió molesto después de verla usar ropa gruesa y abrigada, pero le molestó un poco más ver como ella evitaba cambiarse frente a él. Sin embargo, decidió no decir nada.

Parecía que la propuesta de George de la noche anterior le había hecho caer en cuenta de que él en verdad la amaba, pero también había hecho que desconfiara más de él.

Ni siquiera quería voltear a verlo.

Una vez que Sigrid se vistió y se ató el cabello en una cola de caballo, dijo: "¿Adónde iremos?"

"A esquiar", respondió George.

'Ay, no, no, no. ¡Otra vez va a creer que soy estúpida!', pensó Sigrid.

Después de ponerse el equipo de esquí, salieron y tomaron el teleférico hasta la cima de la montaña y comenzaron su lento descenso.

"Vamos al pie de la montaña para el almuerzo", dijo George.

Después de que George dijese eso, Sigrid quiso llorar. Era una larga distancia que recorrer. ¡Y quién sabe cuántas veces tropezaría en el camino! ¡George era realmente desconsiderado con ese asunto!

A pesar de que Sigrid seguía enojada con George, ella todavía caía en sus encantos.

Era temprano cuando salieron, pero la velocidad del teleférico era muy lenta, por lo que les llevó mucho tiempo subir a la cima. Si no bajaban rápido, probablemente tendrían que esperar hasta bien tarde para almorzar.

Sigrid sintió que debía esforzarse para obtener la 'deliciosa' comida que le esperaba. George había prometido que sería deliciosa, ¿por qué dudaría de él?

Sigrid, que había estado muy nerviosa el día anterior, ahora podía esquiar lentamente como si nada. Solía usar los bastones de esquí de manera incorrecta, por lo que George tenía que vigilarla todo el tiempo y evitar que se cayera. Cuando pudo controlar sus esquís con mayor facilidad, empezó a esquiar por sí sola sin ningún problema.

Miró con orgullo a George, que estaba a su lado, y dijo: "¿Qué tal ahora? ¿No lo estoy haciendo mejor?".

"Sí", dijo George y pensó que era linda.

Sigrid no sabía lo que estaba pensando George. Al ver que él estaba de acuerdo con ella, se emocionó de inmediato e inevitablemente se sintió un poco orgullosa, por lo que aceleró su descenso hacia el pie de la montaña...

'¡Maldita sea... maldita sea! Solo estaba jactándome un poco. ¡No se suponía que acelerara hasta caerme! ¡Qué vergüenza!', pensó Sigrid.

Sigrid entró en pánico y se detuvo a toda prisa usando sus bastones de esquí.

Cuando George la vio detenerse, se sintió un poco confundido. "¿Qué ocurre?", preguntó.

"Estoy muerta de miedo. ¡No presté atención y aceleré un poco!" Sigrid sintió que su corazón latía muy rápido. "¿No te diste cuenta? ¡Iba tan rápido que casi volaba!"

'¿Ella debe estar bromeando?', pensó él.

Al ver que George no respondió, se molestó un poco. "Puede que no haya sido rápido para ti, pero fue demasiado rápido para mí. Tenía mucho miedo de caerme accidentalmente", replicó ella.

Al ver a mucha gente esquiando a gran velocidad, Sigrid sintió un poco de envidia.

Ese lugar para vacacionar era muy grande. Incluso si estuviera esquiando rápido, le tomaría al menos media hora bajar de la montaña. Con la velocidad de Sigrid, tardarían más de una hora en llegar al pie de la montaña.

"Esta es el área de principiantes, no es fácil caerse", recordó George.

'Si te caes en la zona de principiantes, es porque pierdes el equilibrio y te caes a cada rato', pensó él.

La pendiente de la zona de principiantes no era muy pronunciada, y para garantizar la seguridad de los clientes había personal patrullando y limpiando el área. Junto a esto, habían diferentes áreas para esquiadores más avanzados.

'¡Realmente imperdonable! Me caí en la zona de principiantes ayer', pensó Sigrid.

Sigrid miró a George y luego siguió esquiando.

Ella necesitaba descansar cada 20 minutos, tal vez por la tensión o por el hecho de que Sigrid estaba demasiado concentrada en lo que hacía.

¡Ahora estaba más enfocada en algo que en la escuela!