Amor, Dulce Amor romance Capítulo 963

El propósito de decir esas palabras era hacer que Zaden sintiera que Grace estaba mancillada. Moira no tuvo la amabilidad de dejar que Grace tuviera la conmovedora reunión familiar que esperaba.

Es más, aunque se sintiera generosa ese día, tampoco lo haría.

"¡Lo sé!" Grace estaba un poco alterada y demasiado ansiosa para decir algo con claridad. "Sé que va en contra de las reglas, pero no quiero decir nada más con eso. ¡Solo quiero ver a mi hijo!"

"No pretendo..." Antes de que Grace pudiera decir que quería revelarle su identidad a su hijo, se detuvo. Sabía que era pedir demasiado hacerlo. "No soy tan ingenua", agregó.

"Pero esto no es algo que yo pueda decidir", dijo Moira inocentemente.

Grace finalmente había encontrado información sobre su hijo, por lo que no se detendría aquí. Estaba a punto de seguir persuadiendo a Moira para que encontrara una manera de dejarla conocer a su hijo.

En este momento, Zaden, a quien Grace había ignorado hasta ese momento, finalmente estalló.

Agarró el brazo de Grace y la miró con una expresión complicada.

Grace de repente captó la mirada en los ojos de Zaden. Sólo entonces recordó su existencia.

"M-Sr. Andrew..." Grace miró la expresión complicada en los ojos de Zaden e inmediatamente bajó la cabeza. Ella no se atrevía a mirarlo y no sabía qué decir.

El ambiente fue incómodo por un momento, pero Moira estaba encantada. Estaba esperando ver un buen espectáculo.

Después de exponer que Grace había tenido un hijo antes, Moira no creía que Zaden dejaría que Grace se quedara.

Sin embargo, la realidad volvió a abofetear a Moira.

"Todos, váyanse. Ahora". La voz de Zaden era fría cuando miró a Grace.

Por lo tanto, no solo Grace asumió, sino también Moira, que le estaba pidiendo a Grace que se fuera.

Grace se sintió agraviada en su corazón, pero su fuerte autoestima no le permitiría mostrar debilidad en este momento. Sacudió los brazos, queriendo liberarse de Zaden y salir del estudio, pero no logró separarse de sus brazos de inmediato.

Grace miró a Zaden confundida y dijo: "¿No me pediste que me fuera? Por favor, suéltame".

La expresión de Zaden se volvió aún más fea. Apretó los dientes, su mandíbula se hizo más prominente cuando dijo: "No te dejaré ir".

"¿Qué?" Esta vez, Grace y Moira quedaron estupefactas una vez más.

Justo cuando Grace todavía estaba confundida, Zaden se volvió hacia Moira y le dijo enojado: "Te dije que te fueras. ¿No lo entiendes?".

El cuerpo entero de Moira se congeló. ¿Ella era la que se iba?

Después de contarle todo, ¿Zaden todavía le estaba pidiendo que se fuera?

"Zaden". Moira se obligó a sonreír y dijo con voz agradable: "Zaden, ¿cometiste un error? Lo que acabo de decir..."

Zaden no quería volver a escucharlo. Él la miró y dijo: "Ve".

Moira se quedó en silencio.

Aunque la desgana llenó su corazón, Moira no se atrevió a ir en contra de las intenciones de Zaden. Miró a la confundida Grace antes de abandonar el estudio insatisfecha.

Más tarde, Zaden trató de hacer que su tono sonara menos rígido y les dijo a los dos niños que todavía estaban aturdidos: "Douglas, Dulcie, ustedes dos deberían volver a su habitación".

"Quiero que la tía Grace me haga compañía..." Dulcie era densa. Estaba a punto de hacer una petición cuando Douglas la interrumpió.

Douglas era un poco más inteligente que su hermana. Aunque realmente no entendió lo que acababa de escuchar, notó la atmósfera tensa y la expresión molesta que tenía Zaden. Si su hermana menor actuaba con ignorancia en este momento, Zaden probablemente descargaría su ira sobre ella.

Entonces, Douglas tomó la mano de Dulcie y dijo: "Dulcie, volvamos a nuestra habitación. Jugaré contigo".

Dulcie estaba aturdida. Quería discutir y luchar por sí misma. Cuando levantó la vista y vio el rostro de Zaden, al instante perdió todos los pensamientos de ganar. Inmediatamente asintió obedientemente con la cabeza y dijo: "Douglas, vámonos rápido".

Los dos niños estaban asustados por Zaden. En circunstancias normales, Zaden no habría perdido la compostura de esa manera.

Sin embargo, las cosas no habían sido normales ese día. Se había estado conteniendo hasta el punto de que ya no podía más.

En cuanto a preocuparse por los sentimientos de otras personas, no tenía ánimos para hacerlo por el momento.

Una vez que Grace y Zaden fueron los únicos que quedaron en el estudio, solo entonces comenzó el evento principal de la noche.

"Señor Andrew, ¿q-qué quiere decirme?" Grace realmente no podía soportar esta atmósfera. Aunque estaba muy nerviosa, todavía soportó la gran presión y tomó la iniciativa para romper el silencio.

Sin embargo, todavía no se atrevía a mirar hacia arriba y encontrarse con los ojos de Zaden, así que se miró los dedos de los pies.

¿Qué debería decir?

Zaden sintió un nudo en el corazón. No sabía qué decir. Sabía que tenía que desahogar sus emociones de alguna manera antes de poder hablar racionalmente.

Como resultado, Zaden estiró la mano y pellizcó la mandíbula inferior de Grace, lo que obligó a la otra parte a levantar la cabeza. Los dos se miraron.

Esto fue realmente difícil para Grace. Ella hizo todo lo posible para esquivar su mirada.

Cuanto más lo evitaba Grace, más fuerte la mano de Zaden agarraba su mandíbula inferior, obligándola a permanecer en su lugar. Poco a poco, sintió el dolor en la barbilla.

"Sr. Andrew, me duele..." Grace se defendió en voz baja, pero no luchó.

Aunque no entendía por qué Zaden le apretaba la mandíbula, los agudos sentidos de Grace le dijeron que si se resistía a mirarlo a los ojos, él se pondría aún más furioso. A pesar de que estaba en silencio en este momento, estaba a punto de explotar.

Grace no dijo nada más. En cambio, trató de mentalizarse para encontrarse con los ojos de Zaden.

Además, como chef, no debería tener que explicarle todo a su jefe.

"Señor Andrew, estos son mis asuntos personales. No tengo obligación de decírselo", dijo Grace.

Sabía que estas palabras probablemente enfurecerían a Zaden. Después de todo, siempre había sido arrogante y narcisista. Sin embargo, esta era su única opción, por lo que trató de hacer que su tono sonara menos malo.

Efectivamente, Zaden no se enfureció por eso.

Cuanto más supiera y más tiempo mantuviera la calma, menos probable sería que Zaden se enfadara. Comprendió profundamente la posición de Grace en este asunto. No podía culpar a Grace, que no tenía salida en ese momento. Ella no hizo nada malo. Ella era solo una hija que había hecho todo lo posible para salvar la vida de su madre.

"Entiendo", dijo Zaden.

¿Qué? Grace sintió que esto era extraño. ¿Qué tipo de desarrollo fue este?

Además, Zaden sintió que algo extraño ese día, pero no podía decir por qué.

Justo cuando Grace no sabía qué hacer, Zaden dijo: "Está bien, deberías volver y descansar".

Al enterarse de que iba a volver a su habitación, Grace se escapó de inmediato.

Ella no era estúpida. ¿Y si se quedaba y Zaden la torturaba como un loco?

Después de que Grace se fue, Zaden todavía estaba sentado en su estudio. Naturalmente, había interpretado la reacción anterior de Grace como el amor de Grace por él.

Era porque le gustaba que Grace no quería que él supiera estas cosas. Después de todo, todos querían mantener una buena imagen frente a la persona que les gustaba.

Esta noche estaba condenada a ser difícil para todos dormir profundamente.

Aunque Moira todavía se sentía un poco inquieta, sintió que el futuro sería más brillante para ella ya que las cosas habían llegado a este punto. Incluso si eso significaba que Zaden se perdería pensando en sus sentimientos durante unos días, pronto se daría cuenta de lo que era mejor para él.

Mientras Zaden entendiera, Grace no podría quedarse más tiempo.

¡Poco sabía ella que sería la primera en dejar a la familia Andrew!

Al día siguiente, Moira estaba durmiendo cuando alguien abrió la puerta de repente.

"¡Oye! ¿Qué crees que estás haciendo?" Moira, que acababa de despertarse, no estaba de buen humor. Naturalmente, estaba furiosa con los sirvientes que estaban frente a ella.

Sin embargo, sin importar cuán enojada estuviera Moira, los sirvientes no se atreverían a ir en contra de la orden de Zaden.

En ese momento, Jayce entró tranquilamente desde la puerta y ordenó a los sirvientes: "Escuchen, ayuden a la señorita Coulson a empacar su equipaje y despedirla".

Tan pronto como Jayce terminó de hablar, todos los sirvientes comenzaron a cumplir la orden.