"Espera, ¿qué?" Everleigh y Christopher dijeron al mismo tiempo.
Nadie esperaba que Felicia dijera tales cosas. Fue algo realmente increíble.
¿Qué clase de hermana haría que su hermano menor dejara su trabajo para cuidar a sus hijos en casa? No solo eso, sino que eran de la familia Meyer, una gran familia, así que esto resultaba realmente demasiado increíble.
"¿Hay algún problema?" Felicia todavía parecía seria. "Obviamente, el trabajo de Everleigh es mejor y más prometedor que el tuyo. Christopher, tú no puedes llegar a nada como eso. Así que quédate en casa obedientemente y cuida a tu esposa e hijos."
Después de eso, miró a sus padres: "Mamá, papá, ¿qué piensan?"
Samuel y Vanessa se quedaron atónitos por un momento. Estaban un poco sorprendidos. Sin embargo, cuando pensaron en las palabras de su hija, las encontraron razonables. Parecía que estaban a punto de asentir.
Antes de que respondieran, Christopher ya estaba ansioso: "Mamá, papá, no van a estar de acuerdo con eso, ¿verdad?"
Vanessa vaciló y dijo: "Las palabras de tu hermana son bastante razonables. Everleigh está muy ocupada y nuestra familia no necesita el dinero que tú ganas. Deberías estar más con tu familia en casa. Puedes ocuparte mejor de la rutina diaria de Everleigh, estaría genial."
"No, eso sería demasiado ridículo, ¿no? ¿Cómo puede un hombre resignarse a cuidar a sus hijos en casa?"
"Magnífico." Las palabras de Felicia fueron frías. No fueron en voz alta, pero hubo un impulso atronador en sus palabras. Miró a Christopher y dijo: "Está bien que no estés de acuerdo, pero tu tarjeta bancaria se cancelará y ganarás dinero tú mismo."
"¡Felicia! Tú..."
"¿Cómo acabas de llamarme?"
"Has ido demasiado lejos."
Felicia dijo lentamente: "Te he dado a elegir. No puedes tenerlo todo."
Christopher estaba tan nervioso que su rostro se puso verde: "¿Cómo puedes tomar estas decisiones tú misma? ¿Le has preguntado a los demás su opinión? Everleigh aún no ha aceptado eso."
Everleigh estaba mirando el panorama en silencio, pero de repente se vio arrastrada a la discusión y casi se atragantó con la comida.
"Cof Cof..."
"Everleigh, ¿estás bien?" Vanessa rápidamente le dio un vaso de agua.
"Tía, estoy bien." Everleigh bajó la cabeza y se bebió el agua, estaba pensando en cómo revertir la situación.
Cuando levantó la vista, vio que Felicia la miraba: "Everleigh, nuestra familia siempre ha respetado la igualdad de género. Respetaremos las opiniones de todos. Entonces, ¿qué piensas?"
Everleigh dudó, dijo: "Ya que has dicho que los hombres y las mujeres son iguales, entonces se debe respetar la opinión de Christopher. Él tiene sus propios ideales y aspiraciones. En términos de aspectos profesionales, no es peor que yo."
Ella dijo esas palabras desde el fondo de su corazón. Aunque Christopher era un playboy, todavía se tomaba muy en serio el estudio de la medicina. Cuando estudiaba en el extranjero, estaba tan ocupado e inmerso que no descansó durante medio mes.
Felicia no dijo nada.
La atmósfera en la mesa se volvió gradualmente incómoda.
Everleigh comenzó a arrepentirse. Si hubiera sabido que esto sucedería, no habría ayudado a Christopher. Ya había ofendido a su hermana ¿Cómo se hablarían en el futuro?
Después de un tiempo, Felicia dijo: "Está bien, continuaremos dejándolo trabajar por un tiempo."
Estuvo de acuerdo tan rápido que incluso Everleigh se sorprendió. Cuando volvió en sí, todos ya habían superado el tema, como si nunca hubiera sucedido.
Christopher murmuró a su lado: "Eso fue increíble."
"¿El qué?" Everleigh lo miró.
Christopher bajó la voz y susurró al oído de Everleigh: "Mi hermana nunca ha escuchado las opiniones de nadie desde que era joven. No nos hemos visto en otra como esta."
"Tus padres son muy buenas personas." Everleigh todavía estaba emocionada cuando subió al auto.
Christopher bostezó. "Mis padres son realmente grandes personas."
"Entonces, ¿por qué no quieres quedarte en casa?"
"Hay un demonio en la casa. Me quedaría en casa solo si tuviera pensamientos suicidad." Christopher puso los ojos en blanco con rudeza. "Tú también lo escuchaste. ¿Alguna persona normal diría las cosas que dijo mi hermana? ¿Que renuncie y cuide a los niños? ¿Por qué no pensó en pedirme que diera a luz?"
"Si eso fuera posible, creo que tu hermana realmente sugeriría que lo hicieras."
"Everleigh, estás empezando a ser audaz. Incluso ahora estás de su lado, ¿no es así?" Christopher la miró con una mirada de insatisfacción. "Por cierto, ¿qué te dio ella antes de irse?"
"Ah, cierto." Everleigh se acordó de repente. Sacó el dosier en papel que Felicia le dio antes de irse. Lo abrió y de él salieron dos juegos de llaves.
"¿Qué es esto?" Everleigh estaba atónita.
"Mi*rda..." Los ojos de Christopher eran nítidos y cogió el juego de llaves en la mano de Everleigh diciendo: "Mira lo que está haciendo Felicia, ¿podría ser que se ha encaprichado de ti? ¿Qué está pasando aquí?"
"¿Qué pasa?" Everleigh estaba confundida por la reacción de Christopher.
"Echa un vistazo." Christopher sostenía una llave en cada mano. Sacudió la izquierda, luego la derecha. "Estas son las llaves del auto, así que no hablaremos de eso. Pero, estas son las llaves de una villa en Yoreast Hills Garden."
Ella preguntó: "¿Qué significa eso?"
"¿Todavía no lo entiendes? ¿Eres corta? ¿Recuerdas lo que dijo cuando te lo dio?"
Al recordarlo, Everleigh de repente volvió a sus sentidos.
Cuando Felicia le entregó el dosier en papel, dijo unas pocas palabras sin ninguna expresión en el rostro: "Considera esto un regalo de nuestra reunión."

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