Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1020

Resumo de Capítulo 1020 Conocen a Shangguan Yuan: Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma

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Shangguan Yuan siguió a Fang Yuchen escaleras abajo. Se giró para mirar en dirección a la habitación de Jiang Sese. Había una expresión fría en su delicado rostro.

Cuando llegaron a la sala, Fang Yuchen pensó por un momento y sintió que Jin Fengchen estaba siendo demasiado irracional.

Le preocupaba que Shangguan Yuan se lo tomara a pecho y la consoló: “Yuanyuan, Fengchen es así. No lo pienses demasiado”.

Se giró justo para ver la gélida expresión de Shangguan Yuan.

No pudo evitar sentirse un poco agraviado.

Shangguan Yuan ocultó rápidamente su expresión fría y sonrió. “No te preocupes, no lo haré”.

¿De verdad?

Entonces, ¿por qué tenía esa expresión hace un momento?

Aunque Fang Yuchen tenía algunas dudas, no las expresó y solo sonrió. “Me alegro”.

Él pensó durante un rato y luego preguntó: “¿Te llevó de vuelta?”.

Shangguan Yuan asintió: “De acuerdo”.

El viaje en coche fue muy tranquilo. Shangguan Yuan miraba el paisaje que pasaba por la ventana, pensando en el desmayo de Jiang Sese.

Sentía que algo no andaba bien.

Sin embargo, no podía precisarlo.

Miró a Fang Yuchen, que estaba concentrado en su manejo. Reflexionó seriamente y luego fingió preguntar de manera informal: “El Presidente Jin no parece estar preocupado por el desmayo de Sese. ¿Le ha pasado antes?”.

Fang Yuchen la miró de reojo y respondió ambiguamente: “¿Quién sabe?”.

Shangguan Yuan levantó las cejas con sorpresa. “Entonces, ¿tampoco conoces la situación real?”.

Fang Yuchen soltó casi inconscientemente: “Por supuesto que sé”.

“¿Entonces puedes decirme?”.

“¿Eh?”. Fang Yuchen miró a Shangguan Yuan, que esperaba una respuesta y se sintió incómodo.

Shangguan Yuan sonrió ligeramente. “¿No puedes?”.

Fang Yuchen le sonrió apenado. “Lo siento. Es un asunto privado de mi prima. No puedo discutirlo indiscriminadamente”.

Shangguan Yuan se quedó sorprendida. “Oh. Pensé que éramos amigos. Por eso te pregunte. Espero que no te moleste”.

Al oír esto, Fang Yuchen sacudió rápidamente la cabeza. “No me molesta, no me molesta en absoluto”.

“Gracias, Yuchen”.

Al ver su radiante sonrisa, el corazón de Fang Yuchen se aceleró. Su cara se calentó mientras se rascaba la cabeza avergonzado: “No me molesta nada de lo que digas”.

Shangguan Yuan sonrió, luego miró hacia el frente y suspiró ligeramente. “Estaba realmente preocupada. Cuando se desmayó, casi me muero del susto, así que realmente quería hacer algo por ella”.

Volvió a suspirar.

Él podía ver que ella realmente se preocupaba por Sese. Fang Yuchen contempló por un momento. “En realidad, no es que no pueda decirte...”.

Shangguan Yuan se giró y lo miró sorprendida.

Fang Yuchen murmuró: “Sese fue infectada con un patógeno, y actualmente no hay una cura efectiva para él”.

“¿Patógeno?”.

Aquello iba completamente más allá de lo que Shangguan Yuan había imaginado. Se rio ligeramente: “Si realmente es un patógeno incurable, ¿cómo es que tiene un aspecto tan normal?”.

Por lo que ella entendía, cuando alguien estaba infectado, mostraba más o menos algunos síntomas.

Tras obtener el permiso de Jin Fengchen, Mo Xie y Han Yu entraron rápidamente en la habitación.

Instalaron los instrumentos que habían traído y comenzaron a comprobar los signos vitales de Jiang Sese.

Unos veinte minutos después, Mo Xie se dirigió a Jin Fengchen e informó: “Los signos vitales de la Joven Señora son normales, y el patógeno de su cuerpo no muestra indicios de estar activo”.

Jin Fengchen frunció el ceño: “¿Sigue latente?”.

Mo Xie miró las lecturas de los diversos instrumentos: “Por ahora. ¿Cómo ha estado emocionalmente la Joven Señora en los últimos días?”.

Jin Fengchen lo pensó. “Sus emociones han sido bastante estables, tal vez estaba un poco ansiosa por los dos niños justo antes de desmayarse”.

Mo Xie dejó escapar un largo suspiro de alivio: “Tiene que ser. El cuerpo de la Joven Señora no permite que sus emociones fluctúen demasiado, por eso se desmayó. Se despertará cuando descanse lo suficiente”.

“Entonces... ¿Se activará el virus?”, preguntó Jin Fengchen.

“Mientras se tome el medicamento a tiempo, aún podremos controlarlo por el momento, pero una vez que el patógeno desarrolle una resistencia a él, dejará de suprimirlo lentamente”.

En ese momento, la expresión de Mo Xie se volvió solemne. “Lo más importante ahora es desarrollar un medicamento eficaz para erradicar completamente el patógeno lo antes posible”.

“Entonces, ¿están haciendo progresos?”.

Ante la pregunta de Jin Fengchen, Mo Xie bajó la cabeza con culpabilidad. “Lo siento, todavía no hemos progresado. La estructura del patógeno es demasiado complicada, y puede llevar algún tiempo desarrollar un medicamento que pueda erradicarlo por completo”.

Jin Fengchen miró a Jiang Sese acostada en la cama. Su expresión era tan tranquila que no se podía adivinar lo que estaba pensando.

La habitación estaba en silencio, aparte del sonido de los instrumentos médicos.

Mo Xie y Han Yu intercambiaron miradas; ninguno de los dos se atrevía siquiera a respirar.

Después de un largo rato, Jin Fengchen dijo: “¿Conocen a Shangguan Yuan?”.

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