Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1270

El corazón de Liang Xinwei estaba lleno de gratitud.

Sus ojos se empañaron y apartó la vista para limpiarse las comisuras de los ojos. Volvió la vista y miró profundamente a Fang Yuchen.

“No puedes retirar tus palabras”.

Fang Yuchen asintió: “No lo haré”.

Fang Yuchen solo se fue a casa después de las 10 de la noche.

A la mañana siguiente, se estaba preparando para ir a trabajar cuando vio a Jiang Sese parada afuera en cuanto abrió la puerta.

“¿Sese?”. Fang Yuchen exclamó sorprendido y se apresuró a decirle que volviera a casa: “¿Por qué estás aquí?”.

Jiang Sese cerró los ojos mientras las lágrimas brotaban de sus ojos. Se atragantó: “Shangguan Yuan me echó”.

Fang Yuchen frunció el ceño profundamente: “¿Qué pasó?”.

“Yuchen, me pareció oírte decir el nombre de Sese, qué...”.

Shang Ying hablaba mientras salía del comedor. Cuando vio a Jiang Sese dejó de hablar de repente, aturdida.

Reaccionó de repente y corrió hacia Jiang Sese. Al verla llorar, Shang Ying frunció el ceño: “Sese, ¿qué te pasa?”.

Jiang Sese era incapaz de hablar mientras lloraba, las lágrimas fluían incesantemente.

Al ver esto, Fang Yuchen suspiró suavemente: “Vamos a sentarnos en la sala”.

Rodeó a Jiang Sese con un brazo y la llevó a la sala.

Shang Ying los siguió por detrás.

Jiang Sese pensó en los problemas que había pasado para entrar en la familia Shangguan, pensando que podría llevar fácilmente a Jin Fengchen a casa, pero no pensó que la echarían.

Había sido expulsada del cielo al infierno.

Una caída tan grande sería difícil de aceptar para cualquiera.

Por eso Jiang Sese lloraba con tanta tristeza.

Aunque Fang Yuchen y Shang Ying estaban llenos de preocupación, tampoco querían decirle que parara. Solo podían permitirle que dejara salir todas sus emociones.

Después de un largo rato, el llanto se detuvo lentamente.

“Seca tus lágrimas”. Fang Yuchen sacó unos pañuelos de papel y se los entregó.

Jiang Sese los aceptó y se limpió las lágrimas antes de reírse de sí misma: “Soy realmente inútil, solo puedo llorar”.

Su voz estaba un poco ronca de tanto llorar, y todavía sollozaba de vez en cuando.

“¡De qué estás hablando!”. Shang Ying la regañó suavemente. Le cogió la mano y la consoló suavemente: “El cielo no se ha caído, no hay nada que no podamos arreglar”.

“Tía”. A Jiang Sese le dolía el corazón y las lágrimas volvieron a brotar de sus ojos.

“Muy bien, ya no llores”. Shang Ying le secó las lágrimas: “Qué demonios pasó, tienes que decirnos, para que podamos encontrar una manera de arreglarlo”.

Jiang Sese respiró profundamente y controló sus emociones antes de hablar de lo sucedido en la residencia Shangguan.

...

Ese día, mientras trabajaba en el patio delantero, oyó a los demás hablar de la boda de Shangguan Yuan y Jin Fengchen.

“Escuché que la boda de la Señorita se celebrará en la villa, será muy sencilla”.

“¿De verdad? ¿No es muy informal?”.

“No hay otra opción, la Señorita tiene tanta prisa por casarse es debido a la Vieja Señora”.

“Es cierto, su mayor deseo era ver al Joven Amo y a la Señorita formar sus propias familias. Si la Señorita se casara, cumpliría su deseo”.

...

Las emociones de Jiang Sese se confundieron cuando escuchó esto. Su mente estaba ocupada con la idea de que Shangguan Yuan se casara con Jin Fengchen.

Ya era mitad de mes. Si no encontraba la manera de que Jin Fengchen recordara sus memorias, solo podría ver cómo se casaba con otra mujer.

Su corazón se sintió como si fuera arrancado violentamente cuando pensaba en la boda de Jin Fengchen con Shangguan Yuan.

Le dolía tanto que no podía recuperar el aliento.

Cerró los ojos y se retorció las manos. Cuando el dolor de su corazón se calmó un poco, abrió los ojos. Habían recuperado su firmeza habitual.

No podía esperar más, tenía que encontrar la forma de llevar a Jin Fengchen a casa en los próximos días.

La preocupación la superaba, no podía ni pensar. Por lo tanto, tomó una decisión.