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Alrededor de las 10 am, el Fang Group emitió un comunicado para explicar y manejar el incidente relacionado con el vídeo en línea.
“El contenido del vídeo es exacto, pero fue un malentendido. La Señorita Liang Xinwei nunca ha perturbado la relación entre el Señor Fang Yuchen y la Señorita Ye Xiaoyi...”.
Liang Xinwei leyó cada palabra de la declaración en voz alta, y su voz se detuvo de repente.
Su corazón se desplomó, ¿qué querían decir con eso de que nunca habían perturbado la relación entre Fang Yuchen y Ye Xiaoyi?
Cuanto más pensaba en ello, más sentía que algo no estaba bien. Esta declaración había limpiado claramente su nombre, pero también había confirmado que había una relación entre Fang Yuchen y Ye Xiaoyi.
Liang Xinwei cerró su teléfono. No pudo evitar reírse con amargura y burla.
¿Esta declaración reflejaba las intenciones de Fang Yuchen?
¿No dijo que resolvería el asunto del matrimonio arreglado? Si reconocía la relación, cómo la resolvería...
¿En qué estaba pensando?
En ese momento, Liang Xinwei sintió que nunca había entendido realmente a Fang Yuchen.
En ese momento, su teléfono sonó de repente.
Pensó que sería Fang Yuchen llamando para explicarse, pero cuando miró no era él, sino Ye Chenyun quien llamaba.
Cuando descolgó, se oyó la voz preocupada de Ye Chenyun al otro lado: “Weiwei, ¿estás bien?”.
Liang XInwei bajó la mirada con decepción: “¿Cómo podría estarlo?”.
Ye Chenyun guardó silencio durante unos segundos, antes de decir: “Vi el vídeo y la declaración. Me gustaría pedirte disculpas en nombre de mi hermana. Lo siento”.
Los ojos de Liang Xinwei se pusieron rojos. Apretó los labios, temiendo que se le salieran las lágrimas.
“Mis padres están furiosos por esto. Debe ser que están presionando a la familia Fang, así que no le des mucha importancia a lo que dice el comunicado”.
Cuando Liang Xinwei escuchó esto, frunció el ceño: “¿Quieres decir que esa no es la intención de Yuchen?”.
“Es probable”. Ye Chenyun suspiró: “Creo que debe haber mucha presión sobre él también”.
La inquietud de Liang Xinwei disminuyó mucho gracias a las palabras de Ye Chenyun.
Ella debía creer en Yuchen, y no dudar de él.
“Gracias, Hermano Mayor Ye”.
Ye Chenyun rio ligeramente: “De nada. La próxima vez, si Xiaoyi viene a buscar problemas contigo, puedes venir a verme, yo hablaré con ella”.
“De acuerdo”.
Intercambiaron algunas palabras más antes de colgar.
Liang Xinwei dejó escapar un largo suspiro. Miró el número de Fang Yuchen en la pantalla de su teléfono, deliberando si debía o no llamarlo para preguntar qué pasaba.
Sin embargo, temía molestarlo en su trabajo.
Finalmente, desistió de hacerlo. Decidió llamarlo por la noche.
...
En el Grupo Fang.
Fang Yuchen estaba parado junto a la ventana, con su atractivo rostro tenso. Sus ojos eran tan oscuros como la tinta, y era imposible distinguir sus emociones actuales.
¡Toc, toc!
El silencioso despacho resonó con el sonido de dos golpes secos en la puerta.
Fang Yuchen dijo en voz baja: “Adelante”.
Song Yao abrió la puerta y se dirigió a su lado. “Señor Presidente, la declaración fue emitida según sus instrucciones”.
Fang Yuchen respondió con un gruñido y no dijo nada más.
Al percibir que estaba de mal humor, Song Yao no quiso molestarlo y se dio la vuelta para marcharse.
Había caminado unos pasos cuando, de repente, tuvo un pensamiento y se volvió para recordarle: “Señor, creo que debería llamar a la Señorita Liang para explicarse. Eso podría ser lo mejor”.
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