Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1294

Fang Xueman estaba preocupada por Jiang Sese y quería quedarse con ella.

Ella fue rechazada.

“Estoy bien, Madre. La Tía Menor estará aquí conmigo. No te preocupes”.

“Así es, Hermana. No andas bien de salud. Tendría que cuidar de ti también si te quedas”. No es que Shang Ying no quisiera cuidar de ella, pero solo diciendo esto se iría a casa.

“Eso es...”. Fang Xueman lo pensó seriamente y finalmente decidió irse a casa.

Antes de irse, le dijo expresamente a Shang Ying: “Yingying, si pasa algo, acuérdate de decírmelo. No me ocultes nada”.

Shang Ying sonrió sin poder evitarlo. “Muy bien, lo haré”.

Fang Xueman se marchó entonces a gusto.

“Mira lo preocupada que estaba tu madre. Tienes que dejar de actuar tan impulsivamente en el futuro, ¿entiendes?”. Shang Ying miró a Jiang Sese con una expresión seria.

Jiang Sese asintió. “Lo haré”.

“Descansa. Te acompañaré esta noche”, dijo Shang Ying.

“Gracias”.

“De nada”. Shang Ying se adelantó y ayudó a cubrirla con la manta. Luego extendió la mano, le tocó la cabeza y la miró con ojos llenos de dulzura. “Mientras te mejores, esto es más importante que nada”.

Esa noche, Jiang Sese durmió plácidamente.

Cuando se despertó al día siguiente, Shang Ying ya estaba despierta. Shang Ying se volvió hacia ella cuando se levantó y sonrió. “Estoy despierta”.

“Buenos días, Tía Menor”.

Los rayos de sol de la mañana brillaron en la sala y todo se volvió más luminoso. Incluso su humor mejoró un poco.

“Iré a casa a cocinar algo de gachas y algunos platos más, y luego te los traeré”.

Shang Ying temía que no le gustara la comida del hospital, así que decidió ir a casa a cocinar.

“No hace falta que te tomes tantas molestias. Puedo comer algo sencillo”. Jiang Sese no quería que ella viajara de un lado a otro.

“No es ninguna molestia. Volveré pronto”.

Después de que Shang Ying se marchara, Jiang Sese se levantó y fue al baño para lavarse los dientes y asearse. Luego se dirigió a la cabecera de la cama y se sentó despreocupadamente.

Miró al cielo azul de fuera y las comisuras de su boca se curvaron lentamente en una sonrisa. Hoy hacía muy buen tiempo.

Si Fengchen estuviera en casa, seguro que la llevaría a ella y a sus hijos de excursión.

Cuando pensó en esto, su corazón se vio envuelto en una bruma.

¿Cuándo volvería su Fengchen a su lado?

...

Después de que Liang Xinwei enviara a Anan a la escuela, fue al hospital.

Se enteró por Fang Yuchen de que Sese estaba hospitalizada y preguntó ansiosamente qué había pasado.

Yuchen le contó que habían saboteado la boda de Shangguan Yuan y se puso furiosa.

“La Hermana Sese está siendo impaciente e irracional, ¿y tú le sigues la corriente? Deberías detenerla. ¿Y si le hubiera pasado algo? ¿Qué planeas hacer?”.

Cuando dijo esto, hizo una pausa y se dio cuenta de que algo estaba mal y reformuló sus palabras. “No, ya le pasó algo. La Hermana Sese está en el hospital. Son unos auténticos imprudentes”.

“Sese está bien, no tienes que preocuparte tanto. El resultado fue bastante favorable en realidad. La boda fue pospuesta y Sese puede al menos estar un poco más tranquila”.

Aunque así fuera, Liang Xinwei seguía pensando que estaban siendo demasiado arriesgados.

Tras llegar al hospital y preguntar a la enfermera, Liang Xinwei fue directamente a la sala de Jiang Sese.

Antes de llegar, había previsto que Shang Ying estaría allí, pero cuando entró, todavía se sobresaltó al verla.

“Ven. Toma asiento”, dijo Jiang Sese mientras señalaba la silla junto a la cama.

Liang Xinwei se acercó, se sentó y luego preguntó con preocupación: “Hermana Sese, ¿cómo te sientes?”.

“Estoy bien. Mi primo solo está preocupado y quiere que me quede en el hospital unos días más en observación”, dijo Jiang Sese con impotencia. “Están exagerando”.

“Yuchen solo quiere lo mejor para ti”.

Al oír esto, Jiang Sese sonrió y se burló: “Mírate. Hablando por mi primo otra vez”.

“Hermana Sese, te estás burlando de mí otra vez”. Las mejillas de Liang Xinwei se sonrojaron.

“¿Por qué no puedes aceptar una broma?”, dijo Jiang Sese divertida.

Liang Xinwei sintió que si esto continuaba, olvidaría la razón por la que vino.

Rápidamente cambió de tema. “Hermana Sese, esta vez actuaste con demasiada imprudencia. Afortunadamente, estás bien. Si no, ¿qué le pasaría a Tiantian y Xiaobao?”.

La sonrisa en el rostro de Jiang Sese se desvaneció al mencionar esto. “Si no me hubiera arriesgado, mi marido se habría casado con otra mujer”.

“Entiendo cómo te sientes, pero hay otras opciones”, dijo Liang Xinwei.

“No había otras opciones. Esta era la única manera”. Jiang Sese suspiró con fuerza. “¿Crees que yo quería hacer eso? Me quedé sin opciones”.

Liang Xinwei se dio cuenta de repente de que su forma de pensar era demasiado simple y se apresuró a decir: “Lo siento, Hermana Sese. No sabía que esa era la situación”.

“No pasa nada”. Jiang Sese sonrió. “Aunque fue un poco imprudente, resultó bien”.

“La boda fue pospuesta. El resultado está a nuestro favor”.

Los dos se miraron y sonrieron.

Jiang Sese respiró profundamente. “De todos modos, mientras se posponga, todavía tengo una oportunidad”.