Resumo do capítulo Capítulo 1373 Eres realmente patética de Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma
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El mayordomo no pudo evitar fruncir el ceño, pero no dijo nada.
“Cuando la tía vuelva, dile que me llame”.
Ye Xiaoyi se dio la vuelta y se fue después de decir eso.
Mientras salía del patio, Ye Xiaoyi se detuvo y se volvió para mirar la residencia Fang. Sus ojos se entrecerraron.
¡Se convertirá en la señora de la casa!
Con ese pensamiento decidido, se subió al coche y se fue.
...
Fang Yuchen recibió una llamada de su madre pidiéndole que llevara a Weiwei a la Ciudad Jin.
Pensó que había escuchado mal: “Mamá, ¿qué dijiste?”.
“Dije que saques tiempo para llevar a Weiwei a la Ciudad Jin para que conozca a la familia Jin”.
No había escuchado mal.
Fang Yuchen se alegró un poco, pero se preguntó: “Mamá, ¿cómo es que quieres que lleve a Weiwei, la aceptaste completamente?”.
“¿Si no?”. Preguntó Shang Ying con voz airada.
Fang Yuchen se rio ligeramente: “Estoy muy feliz”.
Tras unos segundos de silencio, volvió a decir: “Gracias, Mamá”.
“Si realmente quieres agradecerme, dame un nieto”.
Fang Yuchen estaba bebiendo agua y se atragantó antes de decir con impotencia: “Mamá, ¿por qué tienes tanta prisa? Además, Weiwei y yo aún no estamos en ese punto”.
Shang Ying no esperaba que fuera tan sincero, así que no pudo evitar reírse: “Mocoso, no me importa dónde estén ustedes dos. Solo quiero abrazar a mi nieto”.
“Lo discutiré con Weiwei entonces”. Fang Yuchen respondió en broma.
“Avísame de antemano cuando vengas”.
“Claro”.
Fang Yuchen colgó, y sonrió involuntariamente al pensar en lo que dijo su madre.
Esperaba poder darle a su madre un nieto, tal y como ella quería.
Envió un mensaje a Liang Xinwei, pidiéndole que empacara sus cosas y se preparara para llevarla a ella y a Anan de viaje.
Cuando recibió el mensaje, Liang Xinwei estaba sentada en una cafetería, mientras que Ye Xiaoyi estaba sentada frente a ella.
El entorno era bastante tranquilo, y solo se escuchaba una música ligera en voz baja.
Al oír el sonido del mensaje, Liang Xinwei sacó su teléfono y lo miró. Al ver que era de Fang Yuchen, sus cejas se suavizaron al instante.
Ye Xiaoyi entrecerró los ojos: “Es Yuchen, ¿verdad?”.
Había una pizca de interrogación en su tono brusco.
Liang Xinwei la miró con tibieza y dijo con calma: “Eso no es asunto tuyo”.
“¡Liang Xinwei!”.
Ye Xiaoyi golpeó la mesa con la palma de la mano, y el sonido atrajo la atención de los demás en la cafetería.
La expresión de Liang Xinwei no cambió: “No hace falta que hagas tanto ruido, puedo escucharte”.
“¡Tú!”.
Ye Xiaoyi quería atacarla, pero por el rabillo del ojo vio que las observaban, así que reprimió la ira en su corazón, y exprimió una sonrisa mientras decía con los dientes apretados: “¡Liang Xinwei, no seas tan presumida!”.
“¿Yo? ¿Presumida?”. Liang Xin levantó ligeramente las cejas: “Debe estar equivocada Señorita Ye, ¿cómo me atrevería a ser presumida delante de usted?”.
Ye Xiaoyi escuchó la burla en sus palabras, su rostro se ensombreció de repente y miró a Liang Xinwei con odio: “Déjame decirte, Liang Xinwei, Yuchen solo está teniendo una aventura contigo. ¿Crees que tendrás un final feliz con él?”.
El rostro de Liang Xinwei cambió por un instante, su boca se curvó en una sonrisa superficial. Su tono seguía siendo tranquilo: “No sé si tendremos un final feliz, pero al menos ahora estamos juntos. Comparado con nosotros, Señorita Ye, usted parece bastante patética”.
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