Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1467

Al pasar por delante de una joyería, Jiang Sese vio un par de gemelos para hombres en el escaparate. Llamaron la atención de Jiang Sese.

Se detuvo y miró el par de gemelos a través del cristal del escaparate.

Los gemelos tenían un nombre de muy mal gusto.

'La Fortuna Regresa Cuando El Momento Es Propicio’.

Sin embargo, el diseño era muy atractivo.

Era redondo, envuelto de un círculo de pequeños diamantes, con un diamante azul incrustado en el centro, que brillaba deslumbrante bajo la luz.

Ella no podía dejar de mirarlo.

¡Ella quería comprarlo!

Jiang Sese llevó a Jin Fengchen al interior de la tienda, y una entusiasta dependienta les saludó de inmediato.

“Bienvenidos, Señor y señora. ¿Puedo ayudarlos?”.

“Quiero ese par de gemelos”. Jiang Sese señaló los gemelos de diamante azul expuestos en el escaparate.

“Señora, tiene usted buen ojo. Estos gemelos son de edición limitada”. La asistente se acercó y tomó los gemelos.

“El diamante azul incrustado es muy hermoso, e incluso los diamantes que lo rodean tienen una claridad muy alta”.

Jiang Sese tomó los gemelos en la mano y los miró desde todos los ángulos. El amor que sentía iba más allá de las palabras.

“Me gustan mucho”. Jiang Sese sonrió a la encargada, luego levantó la cabeza y le dijo a Jin Fengchen: “Te lo compraré como regalo, ¿te parece?”.

Jin Fengchen levantó las cejas. “¿Un regalo?”.

“Sí”. Jiang Sese asintió. “El nombre de este par de gemelos es 'La Fortuna Regresa Cuando El Momento es Propicio', que tiene un significado muy bueno. Espero que todo vaya bien y sin problemas para ti en el futuro”.

Sintiéndose conmovido al instante, Jin Fengchen sonrió. “De acuerdo, me gustan mucho”.

“Tiene que gustarte”. Jiang Sese levantó la barbilla con orgullo. “Es un regalo de mi parte”.

Jin Fengchen se rio, su apuesto rostro lleno de cariño.

“Por favor, ayúdame a envolverlo”. Jiang Sese le dio los gemelos a la asistente.

“Un momento, por favor”.

Aprovechando el momento en que la asistente envolvía los gemelos, Jin Fengchen llevó a Jiang Sese por la tienda.

De repente, Jin Fengchen se detuvo frente a una vitrina.

“¿Qué pasa?”. Jiang Sese siguió su mirada y observó los brazaletes de la vitrina.

“Déjeme devolverle el favor”. Jin Fengchen se volvió hacia ella. “Elige uno que te guste”.

Jiang Sese comprendió lo que quería decir y se echó a reír, luego dijo en broma: “No hace falta que sea tan educado, Señor Jin. Sin embargo...”.

Ella se dio la vuelta. “Si quieres darme un regalo, ¿cómo podría negarme?”.

Al ver su linda y adorable expresión, la sonrisa en la comisura de la boca de Jin Fengchen no pudo evitar ensancharse. Sus ojos se volvieron aún más amables.

Jiang Sese miró a su alrededor y descubrió que varias de las piezas eran muy bonitas.

No quería perder el tiempo, así que miró a Jin Fengchen y le dijo con una sonrisa: “Elige una para mí. Mientras sea de tu parte, me gustará”.

“Muy bien”.

Jin Fengchen eligió una pulsera de diamantes azules. “Ponte esto y mira que tal”.

“Ayúdame a ponérmelo”. Jiang Sese extendió su mano.

Jin Fengchen sonrió y la ayudó a ponerse la pulsera.

El diseño único de la pulsera hacía que la esbelta y blanca muñeca de Jiang Sese pareciera más atractiva.

Además, también era un diamante azul. A primera vista, parecía que el par de gemelos que le dio a Jin Fengchen formaba parte de un conjunto de pareja.

“Este entonces”. Jin Fengchen se decidió.

Jiang Sese miró el brazalete que llevaba en la muñeca, sonrió y felicitó: “El Señor Jin tiene muy buen gusto. Me gusta mucho”.

“Bien”.

La asistente se acercó. “Señora, ¿quiere que se lo envolvamos?”.

Jiang Sese sacudió la cabeza. “No, solo me la llevaré puesta”.

“Muy bien”.

Tras pagar los artículos, Jin Fengchen y Jiang Sese salieron de la tienda agarrados de la mano como una dulce pareja recién enamorada.

Cayó la noche del crepúsculo. A medida que las luces de la calle se iban encendiendo, había cada vez más gente en la calle.

“¿Quieres seguir comprando o volvemos a casa?”, preguntó Jin Fengchen.

“Déjame pensarlo”. Jiang Sese miró a su alrededor. Cuando estaba a punto de dar su respuesta, de repente vislumbró una figura familiar.

“Bueno, ya se fueron. Vamos”.

Su Qingyin tomó a Crimmings y salió a la calle. La gente iba y venía. Jiang Sese hacía tiempo que se había ido.

...

Cuando llegaron a casa, Jiang Sese charló un rato con la Señora Jin y subió a ver a los dos niños.

Entró en la habitación de Xiaobao y lo vio sentado en el escritorio, escribiendo en un papel muy seriamente.

Lo miró más de cerca y se dio cuenta de que en realidad estaba respondiendo algunas preguntas de las Olimpiadas de Matemáticas.

Echó un vistazo a algunas preguntas y se sintió mareada.

Ella no entendía nada.

“Xiaobao, ¿estás pensando en participar en las Olimpiadas de Matemáticas?”, preguntó Jiang Sese, desconcertada.

Aunque era muy inteligente, algunas de las asignaturas estaban muy por encima de su programa de estudios, lo que no era algo que pudiera resolver un niño de su edad.

“Estaba aburrido”.

Qué razón tan sencilla.

Las comisuras de la boca de Jiang Sese se crisparon. Por un momento, no supo qué decir.

“Mami, no sé la respuesta de esta. ¿Podrías enseñarme?”. Xiaobao le mostró la pregunta que marcó y se volvió para mirarla con anticipación.

Jiang Sese sonrió torpemente. “Xiaobao, puede que hayas entendido mal algo de Mami”.

“¿Eh?”. Xiaobao ladeó su cabecita. No entendía lo que ella quería decir.

Jiang Sese respiró profundamente, extendió la mano y le tocó la cabeza. “Sé que debes pensar que Mami es muy inteligente y sabe la respuesta, pero...”.

Se encogió de hombros. “No sé”.

Xiaobao dijo: “Oh”, y luego preguntó: “¿Papi está aquí?”.

Jiang Sese asintió. “Sí”.

“Entonces, le preguntaré a Papi”.

Xiaobao cogió el libro y salió corriendo.

Jiang Sese se quedó quieto y no pudo evitar decir con pesar: “Tener un genio como hijo también es difícil”.