Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1497

Jin Fengchen la ayudó a limpiarse las comisuras de la boca. “La próxima vez no devores la comida tan rápido. Te dolerá la barriga”.

Jiang Sese asintió. “Es que tenía mucha hambre”.

“¿Qué tal ahora?”. Jin Fengchen temía que ella siguiera teniendo hambre.

“Ya estoy llena”. Jiang Sese se inclinó hacia delante y lo abrazó. Apoyó la cabeza en su hombro y dijo: “Parece que hace una eternidad que no podemos pasar tiempo a solas así, aparte de dormir”.

Jin Fengchen acarició su suave cabello y las comisuras de su boca se curvaron en una leve sonrisa mientras decía: “Estabas muy ocupada con el trabajo estos últimos días. No tienes tiempo para mí”.

Jiang Sese fingió olfatear y sonrió. “¿Son celos lo que huelo?”.

Ella inclinó la cabeza.

Él la miró.

Sus ojos se encontraron.

Los ojos de Jiang Sese se arqueaban en forma de media luna mientras sonreía. “¿Estás celoso?”.

Jin Fengchen no respondió. Se limitó a mirarla profundamente.

“¿Lo admites?”. Jiang Sese levantó las cejas.

Mirando sus labios rojos ligeramente separados, una luz brilló en sus ojos. Bajó la cabeza y la besó.

Jiang Sese sentía a veces como si fueran una pareja mayor, pero cuando él la besaba, su corazón seguía palpitando rápidamente.

Sus manos se aferraron con fuerza a la ropa de él en la espalda. Cerró lentamente los ojos mientras su aliento invadía por completo todos sus sentidos.

Estaba totalmente inmersa.

“¡Ejem!”.

El repentino sonido sobresaltó a Jiang Sese y se apresuró a apartar a Jin Fengchen.

Jin Fengchen frunció el ceño, visiblemente descontento.

“No era mi intención molestarlos”. Fang Yuchen levantó las manos, mostrando una expresión inocente.

La cara de Jiang Sese se sonrojó y parecía que casi sangraba. Bajó la cabeza y dijo en tono contundente: “¿Qué pasa?”.

Que viniera en ese momento... Era bastante embarazoso.

“Vengo a despedirme. Weiwei y yo volvemos a la Capital hoy”, dijo Fang Yuchen.

“¿Tan pronto?”. Jiang Sese levantó la cabeza para mirarlo. “¿Por qué no te quedas unos días más?”.

“Aún tengo trabajo pendiente en la oficina”. Fang Yuchen sonrió. “Tú y Fengchen pueden llevar a los niños a la Capital cuando estés mejor”.

Jiang Sese asintió. “De acuerdo”.

“Weiwei está haciendo las maletas y no podía venir, así que me pidió que te diga que cuides tu salud”.

Jiang Sese se rio. “¿Por qué siento que todos y cada uno de ustedes me tratan como a una niña? Por favor, dale las gracias a Weiwei de mi parte”.

“De acuerdo”. Fang Yuchen cambió entonces su mirada hacia Jin Fengchen. “Fengchen, ¿puedo hablar contigo un momento?”.

“Volveré pronto”, dijo Jin Fengchen a Jiang Sese.

Jiang Sese se sintió impotente. “No vas a ir muy lejos. Solo vas a salir. No hace falta que me lo digas”.

Jin Fengchen y Fang Yuchen salieron, uno tras otro.

Jiang Sese respiró profundamente, pensando que debían estar hablando de ella.

Giró la cabeza y miró por la ventana, con una expresión teñida de melancolía. ¿Cuándo el patógeno se eliminaría completamente de su cuerpo para que ellos no tuvieran que preocuparse más por ella?

Fang Yuchen salió de la sala y se detuvo. Luego se dirigió a Jin Fengchen. “Aunque el patógeno del cuerpo de Sese fue suprimido temporalmente, no hay garantía de que no se active. Tendrás que vigilarla de cerca”.

“Lo haré”. Jin Fengchen asintió.

“Hazme saber si hay algo que pueda hacer”. Fang Yuchen le dio una palmadita en los hombros. “Ya me voy”.

“Que tengas un buen viaje”.

Jin Fengchen observó cómo Fang Yuchen desaparecía por la esquina del pasillo. Luego, se dio la vuelta y volvió a entrar en la sala.

Verifique o captcha para ler o conteúdoVerificar