El grupo de hombres de negro se dispersó y desapareció sin decir nada. Esto estaba claramente planeado de antemano.
Mo Tingfeng miró en dirección a donde desapareció el coche que llevaba a Bo Gelian. Su expresión era sombría y aterradora. “El grupo de ustedes, quédense atrás para mantener el orden. Los demás vengan conmigo, ¡rápido!”.
Mo Tingfeng condujo personalmente, corriendo por el camino que el coche de Bo Gelian se dirigía, hacia las colinas.
La carretera de colinas era sinuosa. Cuando Mo Tingfeng llegó a la intersección de la carretera de las colinas, los coches ya se fueron.
Afortunadamente, solo había un camino a seguir desde allí, así que aceleró por la carretera hacia las colinas.
...
Bo Gelian sabía que estaba a salvo y dejó escapar un suspiro de alivio, pero aún así mantuvo un aire de dignidad. “¿Quién te envió a salvarme?”.
El hombre de negro sentado a su lado respondió respetuosamente: “Pronto lo sabrá. Ahora lo llevamos a verlo”.
Como no le dio más información, Bo Gelian no se molestó en seguir con el asunto.
Basándose en sus trajes, estimaba que fueron enviados por la organización. Lo que le importaba ahora era que estaba a salvo.
La organización envió un equipo para rescatarlo, lo que demostraba que no se rindieron con él.
Cuando volviera a la organización, conservaría su posición y sus poderes anteriores.
Se sintió reconfortado al pensar en esto.
¿Y qué si Jiang Sese amaba a Jin Fengchen? Jin Fengchen seguiría sin ser rival para él. Simplemente le arrebataría a Jiang Sese cuando llegara el momento.
Mientras Bo Gelian estaba sumido en sus pensamientos, el coche se detuvo al borde de un acantilado, y luego el coche se detuvo lentamente cerca del borde de la pendiente.
“Señor Bo Gelian, estamos aquí, así que por favor salga del coche”. Un hombre de negro abrió la puerta del coche e hizo un gesto a Bo Gelian.
Bo Gelian asintió y salió del coche sin dudarlo.
Tras salir del coche, vio a un grupo de hombres de negro impecablemente vestidos que custodiaban a un hombre, que estaba de espaldas a él.
“Señor, Bo Gelian está aquí”, se adelantó un hombre de negro y le dijo al hombre.
El hombre giró la cabeza y miró a Bo Gelian alegremente. Sonrió y dijo: “Mucho tiempo sin vernos, Señor Bo Gelian”.
Bo Gelian lo reconoció al instante. ¡Era Kyle!
Se sorprendió un poco. “Sí, mucho tiempo. ¿Te pidió mi Señor que vinieras a saludarme?”.
Pensó que el Señor solo envió a unos cuantos hombres de negro para protegerlo, pero no esperaba que hiciera venir a Kyle en persona.
Parecía que el Señor aún le concedía gran importancia.
Kyle y él tenían más o menos el mismo nivel en la jerarquía de la organización. Tener una bienvenida tan grande esperándole era una prueba de que el Señor realmente lo tenía en alta estima.
Ser arrestado no era tan malo después de todo. La organización ahora sabía de su lealtad y pronto le confiarían una enorme tarea.
Kyle ni se inmutó y le sonrió.
“¿No dijiste que mientras lo ordene mi Señor, definitivamente lo harás? Desafortunadamente, el deseo de mi Señor es que te quiere muerto, así que debes ser obediente”.
Después de hablar, pateó la herida de Bo Gelian.
Bo Gelian cayó hacia el borde del acantilado. No había nada a lo que pudiera agarrarse y rodó hacia el precipicio.
Kyle observó cómo la figura caía por el acantilado y sonrió aún más. “¿Quién querría reconocerte como hermano? ¡Eres basura! ¿Y esperas que vaya a rescatarte personalmente? ¡Sigue soñando!”.
Kyle subió al coche despreocupadamente. “Vámonos”.
Todo el grupo de hombres abandonó inmediatamente el lugar.
...
Acababan de salir cuando se oyó el sonido de otros vehículos.
“Señor, la carretera termina más adelante”, exclamaron los hombres de Mo Tingfeng.
Los coches se detuvieron al borde del acantilado. Mo Tingfeng frunció el ceño, salió del coche y miró a su alrededor. Entonces vio algo en el suelo, no muy lejos. Sus pupilas se dilataron de repente.
¡Era un charco de sangre!
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