Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1672

”Señorita, no se enfade. Tiene que haber una forma de resolver este problema. ¡Definitivamente haremos que Jin Fengchen pague el precio!”.

El asistente no se atrevía a decir nada frustrante, aunque no tuviera confianza en su corazón, aún tenía que forzarse a hacer comentarios positivos. Engatusar a Vivian era la máxima prioridad.

Vivian estaba acostumbrada a estas palabras y lo ignoró. Se limitó a mirar la información que tenía en la mano sin decir nada.

El asistente hizo una pausa antes de preguntar: “Señorita, ¿qué debemos hacer?”.

“¿Qué otra cosa podemos hacer? Eres una basura, ¡no sé para qué te contraté!”. Vivian no tenía dónde descargar su ira. Era aún más molesto ver a su asistente tan incompetente en ese momento.

Al asistente le latía el corazón en el pecho y un sudor frío le recorría la frente, sin saber qué hacer.

“¡Llama a Zhou Qing, del departamento de finanzas, para que suba inmediatamente!”. Ordenó Vivian con cara seria y voz fría.

“De acuerdo”. Respondió el asistente y se fue rápidamente a buscar a Zhou Qing, jefe del departamento de finanzas.

Al cabo de un rato, Zhou Qing volvió detrás de él: “Señorita, ¿quería verme?”.

“¿Cuál es ahora la situación financiera de la empresa?”. Vivian golpeó el escritorio y preguntó impacientemente.

Zhou Qing dijo nervioso: “De momento, no estamos seguros. Primero tenemos que investigarlo todo. No se preocupe, esta noche...”.

“¡Basura!”. Vivian lo interrumpió enfadada.

Zhou Qing se calló inmediatamente y no se atrevió a hacer ruido.

Los fríos ojos de Vivian los recorrieron. “¡Dame los resultados mañana por la mañana, o ninguno de ustedes tendrá trabajo!”.

“Sí, sí, sin duda acabaremos la auditoría esta noche”. Zhou Qing respondió con fingido respeto.

De hecho, él también tenía sus quejas sobre este asunto, pero solo se atrevía a enfadarse sin expresarlo.

Al principio, cuando Vivian se hizo cargo de la empresa, también pensó que esta mujer tenía una buena estrategia. Inesperadamente, esta mujer se atrevía a robar los proyectos del Grupo Jin de forma tan temeraria.

Ahora quería que le diera los datos en tan poco tiempo, lo que obviamente le haría pasar un mal rato.

Sin embargo, no tenía elección. Era un empleado de la empresa.

Solo podía hacer lo que le mandaran.

Cuando regresó al departamento financiero, informó a todos los empleados del departamento de que hicieran horas extras toda la noche para calcular las ganancias y las pérdidas del proyecto.

Al día siguiente, entró en el despacho de Vivian con aire desanimado.

“Señorita, terminamos la valoración”.

Vivian dijo fríamente: “Dime”.

“Hasta ahora, perdimos un total de 132 millones”. Zhou Qing dijo, y tembló por todo el cuerpo.

Al oírlo, ¡Vivian frunció el ceño y puso cara de pocos amigos!

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