Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 1742

Después de que Jin Fengchen pensara un momento, preguntó escuetamente: “¿En qué quieres que te ayude?”.

Al oír esto, la expresión de Mo Tingfeng se suavizó un poco.

Sabía que, puesto que Jin Fengchen preguntó eso, significaba que tenía algunas conexiones allá.

Miró a Jin Fengchen, luego le explicó brevemente la información que Vivian le dio, y después dijo: “Las principales fuerzas de Hebrew están en su base en Norteamérica, y son sospechosas de comercio ilegal de diamantes. En la actualidad, este lote de diamantes eran probablemente los incautados a la familia Drona en Sudáfrica.

“No sé lo suficiente sobre la situación en Norteamérica. Quiero preguntarte si tienes alguna forma...”.

Luego hizo una pausa.

Jin Fengchen comprendió el resto.

Jin Fengchen ya tenía un cierto conocimiento del asunto y también comprendía las dificultades a las que se enfrentaba Mo Tingfeng ahora.

Bajó ligeramente los ojos y dijo: “Déjame ver. Te avisaré en cuanto tenga noticias”.

“Entonces tendré que molestarte, Presidente Jin. Esperaré tus noticias”.

Aunque no obtuvo una respuesta definitiva, Mo Tingfeng respiró aliviado.

También estaba muy sorprendido. No esperaba que la red de Jin Fengchen fuera tan vasta y pudiera extenderse por todo el mundo.

...

De vuelta al Grupo Jin...

Cuando Jin Fengchen regresó a la empresa, llamó a Gu Nian a su despacho.

“Joven Amo, ¿cuáles son sus instrucciones?”.

“Investiga los negocios de Hebrew y la situación actual en Norteamérica”.

“Sí”.

Gu Nian adivinó que se trataba de algo relacionado con el asunto policial y se apresuró a salir para ejecutar las órdenes.

Al ver que guardaba silencio, Vivian se puso un poco nerviosa. “Me prometiste que, mientras te lo contara todo, garantizarías mi seguridad. No puedes estar quemando puentes ahora, ¿verdad?”.

Mo Tingfeng se burló. Dados los crímenes en los que ella estaba involucrada, debería estar encerrada, y aun así, se atreve a pedir tanto.

Sin embargo, aún tenía cierta influencia y poseía información que la policía necesitaba. Así que solo podía seguirle el juego.

Mo Tingfeng pensó por un momento, luego asintió. “Organizaré una nueva localización”.

Inesperadamente, Vivian dijo directamente: “No hay necesidad de tomarse tantas molestias. Conozco un buen lugar, así que haz las maletas y múdate allí”.

“¿Oh?”.

Mo Tingfeng estaba un poco sorprendido. “¿Dónde?”.

“A tu casa. Quiero vivir contigo”. Su tono era uno que no podía ser refutado.

Nadie quería vivir con ella más que Mo Tingfeng. No importa donde se mudara, no estaría tan segura como al lado de Mo Tingfeng.