Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 265

Ciudad del Sur…

El taxi se detuvo frente a un edificio de apartamentos. Jiang Sese abrió la puerta y salió, luego miró al edificio de ladrillos rojos.

Este era el lugar donde iba a vivir de ahora en adelante.

"Señorita, ¿necesita ayuda para llevar su equipaje arriba?", preguntó el amable conductor.

Dándose la vuelta, Jiang Sese sonrió. "No, gracias. Puedo hacerlo yo misma".

Se había ido con tanta prisa que solo tuvo tiempo de traer ropa, artículos de uso diario y libros, que cabían en dos maletas. Podía llevarlos arriba por sí misma.

Después de pagarle al conductor, le agradeció de nuevo y arrastró las dos maletas al edificio.

El administrador del edificio la llevó al apartamento en el que iba a vivir y le dio la llave. "El apartamento ha sido ordenado y está muy limpio ahora. Puede mudarse inmediatamente".

"Gracias".

Jiang Sese sabía que Lu Zheng había arreglado esto de antemano y apreciaba mucho su preocupación. Sin embargo, no sabía qué hacer para devolverle el favor.

El apartamento consistía en dos dormitorios y una sala de estar. No era muy grande, pero era un lugar acogedor.

El apartamento estaba muy limpio, sin una sola partícula de polvo. Aparte de la comida, venía con todo, desde muebles hasta utensilios de cocina.

Todo lo que tenía hacer era desempacar su equipaje.

Uno por uno, colocó los libros ordenadamente en la estantería y tan pronto como hizo eso, sonó su teléfono.

Era un teléfono nuevo que Lu Zheng había preparado para ella.

"No sé qué pasó entre tú y Jin Fengchen, pero no puedo dejar que te mudes a Ciudad del Sur sola. Toma este celular. El número es nuevo. Yo te lo compré. Y no te preocupes, soy la única persona que conoce este número".

Así de cuidadoso era Lu Zheng. Había pensado en todo para ella.

Después de caminar hacia el teléfono, lo cogió. "Sénior Lu".

"¿Ya llegaste?", ella escuchó la suave voz de Lu Zheng.

De alguna manera, Jiang Sese quería llorar. Fue al balcón y respiró profundamente, tratando de sonar lo más relajada posible. "Sí, he llegado. Gracias, Sénior Lu. Me gusta mucho el apartamento".

"Me alegro de que te guste".

Ambos se quedaron en silencio.

Lu Zheng solo habló un rato después. "Sese, ya hice que admitieran a tu madre en un hospital. Puedes echar un vistazo a las instalaciones. Si no te gusta, puedo encontrar otro hospital para ti".

Jiang Sese sonrió. "Sénior Lu, usted lo escogió, así que estoy segura de que es perfecto".

Tan pronto como dijo eso, escuchó la risa burbujeante de Lu Zheng en el otro extremo. "Me alegra saber que confías tanto en mí".

Jiang Sese solo sonrió, pero no dijo nada más.

"Te enviaré la dirección del hospital. Puedes echar un vistazo y decirme si necesitas algo".

"Gracias, Sénior Lu".

Realmente le había hecho un gran favor esta vez. Aparte de dar las gracias, ella no sabía qué más decir o qué hacer para compensarlo.

"Sese, eres mi amiga, así que por supuesto que te ayudaré. No tienes que agradecerme por todo".

Jiang Sese respondió con un tranquilo "sí".

"Te dejaré para que termines entonces. Te enviaré la dirección más tarde".

"Claro".

Ella colgó y recibió la dirección de Lu Zheng un momento después.

Jiang Sese abrió el mensaje, luego tomó su bolso y se fue del apartamento.

Ahora que su madre estaba finalmente mejorando, Jiang Sese se preguntaba si la transferencia afectaría el estado de salud de su madre. Tenía que preguntarle al nuevo médico a cargo de su madre.

El hospital que Lu Zheng arregló era privado y con un gran ambiente. Era tranquilo y excelente para recuperarse.

Y lo más importante, el personal del hospital era muy amable.

"Ya conozco todo sobre el caso de su madre. Por favor, quédese tranquila. El hospital y yo haremos todo lo posible por tratar a tu madre".

El médico a cargo era un amable hombre de mediana edad.

"Gracias, doctor". Jiang Sese se sentía agradecida.

El doctor sonrió suavemente. "De nada. Solo hago mi trabajo".

Supuso que la Ciudad del Sur tenía que ser un lugar bullicioso a esa hora.

Cuando regresó a su apartamento, le sorprendió la escena vacía y solitaria cuando abrió la puerta. Una mano parecía haber agarrado su corazón y se quedó parada en la puerta, aturdida.

Por un momento, tuvo miedo de entrar.

El sonido de la puerta cerrándose detrás de ella la despertó. Solo entonces entró en el apartamento.

"¡Clic!".

El apartamento estaba muy bien iluminado después de que ella encendió la luz, pero eso no hizo nada para aliviar su soledad.

Después de quitarse los zapatos, entró en la sala descalza.

Miró a su alrededor, y no pudo evitar reírse.

"Antes vivía sola. ¿Desde cuándo me afecta tanto?”.

"¿Es porque me he acostumbrado a tener a Xiaobao y Jin Fengchen cerca?".

Los hábitos humanos podían ser algo muy aterrador.

No quería mentirse a sí misma; realmente echaba de menos a Xiaobao y a Jin Fengchen.

Su nariz se contrajo involuntariamente. Se mordió el labio y comenzó a llorar.

Se había establecido aquí en la Ciudad del Sur, pero se sentía perdida. No tenía ni idea de lo que haría de ahora en adelante.

Esta ciudad, nueva y extraña, solo la hizo sentirse más horrible.

Se preguntaba si Jin Fengchen la buscaría.

Probablemente lo haría.

Ahora mismo, probablemente la culpaba por su engaño y por irse sin despedirse.

Ella no quería hacerlo, pero tenía mucho miedo. Tenía miedo de enfrentarse a él, temía que no la quisiera más después de saber la verdad.

Prefería irse ella misma a que le pidieran que se fuera.

Sería mejor para ambos de esta manera.