Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 264

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Después de renunciar exitosamente a su trabajo, Jiang Sese llamó a un taxi. Cuando el conductor cargó su equipaje en el coche, miró hacia atrás al lugar donde había vivido los últimos años y sintió nostalgia por el hecho de tener que irse.

No sabía cuándo volvería después de irse esta vez.

Pensó en Jin Fengchen, el hombre que siempre había sido tan amable con ella.

Sintió un dolor en el pecho.

"Señorita, todo el equipaje está en el maletero".

Al oír la voz del conductor, Jiang Sese sonrió. Bajó la mirada para ocultar todas sus emociones, luego se dio la vuelta y se subió al coche.

"¡Adiós!".

Sabía que tal vez nunca lo volvería a ver.

El taxi arrancó y luego condujo lentamente.

Un Bentley negro pasó a toda velocidad por delante del taxi y si Jiang Sese hubiera levantado la mirada en ese momento, habría visto al hombre que conducía el coche.

Era Jin Fengchen.

Pero ella no levantó la mirada.

Y Jin Fengchen se estaba concentrando en la carretera, así que los dos se perdieron el uno al otro, así como así.

Jin Fengchen no pudo dormir la noche anterior, solo se rindió y se quedó dormido antes del amanecer.

Era pleno día cuando se despertó.

Él saltó. "¡Sese!".

Salió corriendo de la habitación, todavía con la misma ropa del día anterior.

Casi se choca con Jin Fengyao en las escaleras.

"Hermano, tú...".

Antes de que Jin Fengyao pudiera terminar, vio a su hermano correr por las escaleras como una ráfaga de viento.

Jin Fengyao estaba desconcertado. Reaccionó y siguió a su hermano de inmediato.

Salió justo a tiempo para ver a Jin Fengchen irse.

Jin Fengyao frunció los labios. No tuvo que preguntar para saber que su hermano iba a buscar a Jiang Sese.

Pero si ella quería ver a su hermano o no, era otra historia.

Jin Fengchen se sintió incómodo y su párpado derecho seguía temblando, como si algo estuviera a punto de suceder.

Jin Fengyao le dijo la noche anterior que debería darle a Sese un tiempo para calmarse, por lo que Jin Fengchen se había impedido a sí mismo acercarse a ella.

Pero Jin Fengchen ya se estaba arrepintiendo. Pensó que debió ir a verla anoche y decirle que todo estaría bien y que no le importaba su pasado.

Con ese pensamiento, pisó el acelerador. No podía esperar a verla y decirle cómo se sentía él.

El Bentley negro se detuvo fuera de la casa de Jiang Sese. Jin Fengchen salió y rápidamente corrió hacia el edificio de apartamentos.

Cuando llegó al apartamento de Jiang Sese, Jin Fengchen golpeó la puerta. "Sese, abre. Sé que estás ahí".

Pero no se escuchó ningún sonido desde el interior.

Frunció el ceño y golpeó la puerta con la palma de la mano unas cuantas veces más. "Sese, soy Fengchen. Por favor, abre la puerta".

"Joven".

De repente, una voz vieja vino por detrás de él.

Se dio la vuelta y encontró a un anciano, que vivía justo al otro lado del pasillo de Jiang Sese.

"Disculpe por todo el ruido". Pensando que sus fuertes golpes habían perturbado al anciano, Jin Fengchen se disculpó de inmediato.

"¿Busca a la joven que vive aquí?", preguntó el anciano.

Él asintió. "Sí. Tío, ¿la ha visto?".

"Se ha mudado".

Esas palabras sorprendieron a Jin Fengchen y preguntó inmediatamente: "Tío, ¿qué ha dicho? ¿Se mudó?".

"Sí. Se fue temprano esta mañana".

Sentado en su coche, Jin Fengchen aún no se había recuperado de la impactante noticia de que Jiang Sese se había mudado.

Incluso se había mudado para evitarlo.

Sonrió amargamente, preguntándose si él era tan poco fiable para ella.

"¡Maldita sea!".

Golpeó el volante con el puño, se enfadó con sí mismo. "No debí haber escuchado a Fengyao y darle tiempo para que estuviera sola. Hice posible que se escapara".

De repente, sonó su teléfono.

Era Jin Fengyao llamando.

Contestó y escuchó la voz de pánico de Jin Fengyao en el otro extremo. "Hermano, malas noticias. Mi cuñada ha dejado su trabajo."

"¿Ha renunciado?”.

"No solo se ha mudado, sino que incluso ha dejado su trabajo".

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