Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 287

Los ojos de Su Qingyin brillaron cuando vio la gasa que envolvía el brazo de Jiang Sese. Mostrando una mirada de preocupación, preguntó: "Señorita Jiang, ¿a dónde ha ido? Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que la vi".

La mirada de Jiang Sese se enfrió cuando recordó lo que Su Qingyin le dijo a Xiaobao. "Viaje de negocios", dijo apáticamente.

"Oh, un viaje de negocios".

Su Qingyin actuó como si acabara de darse cuenta de algo y le sonrió. "Creía que habías discutido con Fengchen y habías roto con él".

Las cejas de Jiang Sese se crisparon, pero enseguida se rio a carcajadas. "Señorita Su, debe estar decepcionada".

Su Qingyin estaba aturdida. Para cuando hubo procesado las palabras de Jiang Sese, ya no pudo mantener la sonrisa en su rostro.

Ella había querido avergonzar a Jiang Sese, pero esta mujer de lengua sorprendentemente afilada se había defendido a cambio.

"Por supuesto que no. Es que la tía Qin ha estado emparejando a Fengchen y Li Yuanyuan mientras tú estabas fuera. Por eso pensé que habías roto con él".

Estaba sonriendo cuando sacó el tema, dando a los demás la impresión de que había mencionado el asunto despreocupadamente; sin embargo, lo había hecho completamente a propósito.

Jiang Sese sonrió. "Señorita Su, gracias por visitarme hoy. Si no tiene nada más que decir, por favor, vuelva. Estoy cansada y me gustaría descansar".

No quería perder el tiempo con una don nadie, ¡y mucho menos con una que tenía intenciones maliciosas contra ella!

Su Qingyin se quedó boquiabierta, pues no esperaba que le pidieran que se fuera en tan poco tiempo. Rápidamente recuperó el sentido común y dijo avergonzada: "Ya que quieres descansar, no te molestaré más".

Se dio la vuelta y se dispuso a marcharse.

Sorprendida, Jiang Sese levantó una ceja. "¿Se va así como así? Pensé que insistiría descaradamente en quedarse aquí".

"¡Oh, eso me recuerda!".

Cuando Su Qingyin estaba a punto de llegar a la puerta, se detuvo y se dio la vuelta, luego preguntó con una sonrisa: "Señorita Jiang, hay algo que no pude entender. ¿Puedo preguntarle sobre ello?".

"¿Qué?".

"No entiendo cómo ha vuelto en un momento tan perfecto. Volvió en el momento en que Xiaobao fue secuestrado. ¿No fue demasiada coincidencia?".

Jiang Sese frunció el ceño. "¿Y? ¿Qué está tratando de decir?".

La sonrisa de Su Qingyin se intensificó. "Nada. Solo que me parece extraño".

"No hay nada raro en ello".

Una voz sombría resonó detrás de Su Qingyin.

Estaba tan asustada que se dio la vuelta. Era Jin Fengchen.

Su rostro se iluminó de alegría e incluso sus ojos brillaron. "Fengchen".

"¿Qué estás haciendo aquí?". Él la miró fríamente, su desagrado por ella era tan evidente como siempre.

Su Qingyin no podía aceptarlo, pero siguió manteniendo su sonrisa. "Estoy aquí para visitar a la Señorita Jiang después de que me enteré de que estaba herida y hospitalizada", dijo suavemente.

"¿Has terminado tu visita?", preguntó.

"¿Eh?". Ella no le entendió inmediatamente.

"Si tu visita ha terminado, por favor, vete a casa", dijo Jin Fengchen con impaciencia.

La sonrisa de Su Qingyin desapareció inmediatamente.

"¡También me está echando!".

"¡No puedo aceptar esto sin más!".

"¡Realmente no puedo!".

Giró la cabeza para lanzar una mirada de reojo a Jiang Sese y apretó los dientes en secreto. "¡No puedo dejar que esta mujer viva bien!".

Una idea la asaltó, devolviendo la sonrisa a su rostro. Fingió preocupación y preguntó: "Fengchen, ¿has atrapado a los secuestradores de Xiaobao?".

"Métete en tus asuntos". Jin Fengchen frunció el ceño, sonando un poco impaciente.

Estaba considerando la posibilidad de obligar a Su Qingyin a salir si seguía teniendo la falta de tacto de quedarse allí.

La postrada en la cama Jiang Sese no tenía expresión, pero su corazón ya estaba sumido en un torbellino de emociones.

"¿Qué malvado plan está tramando Su Qingyin ahora?".

Entonces escuchó a Su Qingyin decir: "Fengchen, creo que debe haber algo más en el secuestro de Xiaobao. Debe haber alguien moviendo los hilos".

Estaba mirando a Jiang Sese cuando habló.

Ninguna persona en su sano juicio sería capaz de no entender su significado.

Jiang Sese hizo una mueca. "Así que, después de todo lo dicho y hecho, ella está tratando de decir que yo ordené el secuestro de Xiaobao, ¿no es así?".

El rostro atractivo de Jin Fengchen se ensombreció cuando captó el significado de Su Qingyin. Su tono era aún más frío que antes, tan helado como la nieve de diciembre cuando dijo: "¿Has terminado de hablar? Si es así, por favor, vete".

No estaba dispuesto a romper por completo su relación con Su Qingyin porque sus familias eran amigas desde hacía mucho tiempo, pero al hacerlo, parecía haberla envalentonado para actuar aún peor.

"¡Grr, grr!".

Para su vergüenza, su estómago empezó a gemir.

Cuando Xiaobao lo oyó, ladeó la cabeza para mirarla y dijo con seriedad: "El estómago de Mami está diciendo que se muere de hambre".

Jiang Sese estaba tan avergonzada que su cara se puso roja.

Ver la sonrisa reprimida en el rostro de Jin Fengchen la irritó. "¿Es tan gracioso?".

Él se rio. "No, solo estoy pensando que realmente estás aquí y no es un producto de mi imaginación".

Eso extinguió su ira y en su lugar la hizo sentir vergüenza.

"Lo siento", dijo en voz baja.

El daño que le había causado al marcharse durante dos meses era mucho mayor de lo que ella había imaginado.

En lugar de responder, dijo: "Come".

Le metió un poco de sopa de arroz en la boca.

"Puedo hacerlo yo misma", dijo inmediatamente Jiang Sese.

Él levantó una ceja. "¿Estás segura?".

Miró la gasa que le envolvía el hombro.

"En realidad no", dijo ella, curvando los labios. Solo entonces abrió obedientemente la boca.

Debía de estar hambrienta.

Con la ayuda de Jin Fengchen, se terminó todo el arroz.

"¿Quieres más?", le preguntó.

"No, estoy llena".

Dejó escapar un eructo al hablar.

Jin Fengchen se echó a reír y se burló de ella: "Parece que no mientes. Debes estar realmente llena".

"¡Eres tan molesto!". Jiang Sese le lanzó una mirada resentida.