Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 635

Tras completar los trámites de alta, Jin Fengchen llevó a Jiang Sese a casa.

Cuando se enteró de que Jin Fengchen había salido el día anterior de la oficina con prisas, Zi Feng estuvo haciendo guardia junto a la puerta de la casa de los Jin desde entonces.

Pensó que a Xiaobao le había pasado algo, pero Xiaobao volvió a casa a tiempo la noche anterior.

En el momento en que vio a la persona en brazos de Jin Fengchen, todo se aclaró.

Pasara lo que pasara, Jiang Sese siempre estaba en la cima del corazón de Jin Fengchen.

Zi Feng vio la preocupación y la angustia en los ojos de Jin Fengchen.

La envidia y el resentimiento surgieron inevitablemente en su corazón. A pesar de los años, seguía perdiendo ante esta mujer.

Jiang Sese durmió durante medio día. Un débil sonido en sus oídos y la sensación de humedad en su cuello la despertaron.

Abrió los ojos y parpadeó mientras miraba a su alrededor.

Jin Fengchen estaba estrujando una toalla húmeda. El agua caía en un tazón, formando finas ondas.

Al ver que Jiang Sese abría los ojos, el hombre sonrió y dejó la toalla a un lado.

Miró fijamente a Jiang Sese con una expresión amable: "Estás despierta".

El hombre entonces puso suavemente su mano en la frente de Jiang Sese y comprobó que ella no estaba tan caliente como antes. Un enorme peso se quitó de su corazón.

Jiang Sese abrió su boca seca para hablar, pero no pudo.

Ella tenía la garganta reseca, como si hubiera estado caminando por el desierto durante mucho tiempo. Era como si tuviera grava en la garganta.

La mujer arrugó la cara de dolor.

"¿Quieres agua?".

Jin Fengchen ya se había levantado y se había dado la vuelta para agarrar un vaso de agua tibia, el cual luego acercó a la boca de Jiang Sese.

Sujetando el borde del vaso, Jiang Sese engulló el agua y se sintió viva.

Ella miró a su alrededor y se dio cuenta de que estaba en una habitación desconocida.

Las cortinas amarillo pálido ondeaban con la brisa y el estilo azul turquesa parecía muy cálido y acogedor. A ella le gustaba mucho la decoración.

"¿Dónde estoy?", dijo con voz ronca Jiang Sese con los labios fruncidos.

Sin embargo, para Jin Fengchen, este era el sonido de la naturaleza.

"En mi casa. Estás enferma. Respondí a tu llamada esta mañana", dijo Jin Fengchen concisamente.

Jiang Sese estaba bebiendo y se atragantó con su agua al oír eso.

No esperaba haber llamado a Jin Fengchen por error.

Agarrándose la garganta, el rostro de ella se enrojeció por la tos.

De repente, recordó algo. Le preguntó a Jin Fengchen con ansiedad: "¿Dónde está Tiantian?".

Jin Fengchen le dio unas ligeras palmaditas en la espalda y dijo: "No te preocupes, está con Xiaobao".

Finalmente, la mente de Jiang Sese se tranquilizó.

"Acuéstate y descansa. Todavía estás muy débil".

Después de hablar, Jin Fengchen no permitió ninguna objeción y la arropó.

Jiang Sese sacudió la cabeza. Ella sabía perfectamente que ese era el dormitorio de Jin Fengchen y que esa era su cama.

Su estancia en ese lugar era... inapropiada.

Después de meditarlo un rato, Jiang Sese se movió y apartó la manta gris de su cuerpo.

"Gracias por lo de hoy, pero ahora me llevaré a Tiantian a casa", dijo ella mientras se esforzaba por salir de la cama.

Jin Fengchen frunció el ceño hasta que sus cejas formaron una línea recta.

El hombre colocó su brazo en los hombros de Jiang Sese. Él tenía una mirada enérgica en sus pupilas negras.

"Quédate aquí. Todavía no estás bien. De todas formas, no hay nadie que te cuide allá".

Jiang Sese se quedó sin palabras ante las palabras de Jin Fengchen.

En efecto, no era prudente volver a la casa de la familia Fu en ese momento.

Tanto Fu Jingyun como el Amo Fu estaban cuidando a la Señora Fu en el hospital. ¿Quién iba a cuidar de ella?

Jin Fengchen sonrió amargamente y dijo: "No haré nada que te lastime".

"No es eso lo que me preocupa", explicó Jiang Sese con ansiedad y una expresión de nerviosismo en su rostro.

En realidad, a ella no le preocupaba que Jin Fengchen le hiciera algo malo. Ella estaba segura de esto.

Mientras tanto, Jin Fengchen encontraba la cara de nerviosismo de la mujer increíblemente bonita.

Cada pequeña expresión que ella ponía era muy atractiva. La sonrisa de la cara del hombre se amplió inadvertidamente.

Al ver la sonrisa de Jin Fengchen, Jiang Sese se desconcertó y preguntó: "¿De qué te ríes?".

"De nada. Deja que llame a los niños".

Conteniendo su sonrisa intensa, Jin Fengchen masajeó la parte superior de la cabeza de Jiang Sese. Luego salió de buen humor para llamar a los niños.

Al darse cuenta de que Jiang Sese había despertado, Xiaobao y Tiantian estaban claramente encantados.

Los dos pequeños rodearon la cama y charlaron sin parar con Jiang Sese.

Xiaobao estaba encantado de saber que Jiang Sese y Tiantian se quedarían en su casa durante dos días. Se quedó rondando por las cercanías de la habitación de su madre y la acosó con preguntas.

Jin Fengchen también canceló todos los asuntos relacionados con el trabajo y se quedó en casa con el trío.

Las voces de las cuatro personas resonaban en la habitación, creando un ambiente cálido.

Por la noche, la fiebre de Jiang Sese casi había remitido.

Ella sentía su cuerpo pegajoso y se quejó a Jin Fengchen: "Es muy incómodo no poder bañarme cuando estoy resfriada".

Jin Fengchen llamó inmediatamente al médico. El médico dijo que, aunque el cuerpo de ella estaba débil, estaría bien siempre que no fuera una ducha.

Jin Fengchen se dirigió al instante al baño y llenó la bañera con agua caliente.

Una vez preparado todo, Jin Fengchen llevó a Jiang Sese al baño.

Aunque Jiang Sese se resistió durante todo el proceso, para Jin Fengchen no fue más que un cosquilleo.

Al final, Jiang Sese simplemente renunció a resistirse y lo dejó hacer lo que quería.

Sin embargo, las acciones de este hombre no eran algo que ella pudiera rechazar.