Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 847

Resumo de Capítulo 847 Ver a Tía de nuevo: Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma

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En el momento en que Fang Yuchen dijo esto, el asombro en el corazón de Jiang Sese aumentó.

Del mismo modo, la cara de Jin Fengchen también tenía una expresión de sorpresa.

Sus finos labios se abrieron ligeramente mientras decía en señal de invitación. “Resulta que eres de la familia de mi suegra. ¿Por qué no entramos y charlamos?”.

Fang Yuchen vino aquí con un propósito. Cuando escuchó la invitación, naturalmente agradeció a Jin Fengchen cortésmente antes de asentir.

Al pasar por la sala, el Amo Jin y la Señora Jin se sorprendieron ligeramente al ver al desconocido antes de asentirle cortésmente.

Cuando entraron en el estudio, Jiang Sese tomó asiento en el sofá y se apartó incómodamente el pelo suelto de las orejas. “Lo siento... Nunca he oído a mi mamá hablar de su lado de la familia, así que me sorprende bastante oír quién es usted”.

Esa era la verdad, no sabía nada de su madre Fang Xueman.

Después de que ambas se reunieran, Fang Xueman nunca había sacado el tema y a ella nunca se le había ocurrido preguntar.

Por lo tanto, Jiang Sese no pudo evitar sentirse bastante confundida ante la repentina aparición de este pariente.

Jin Fengchen guardó silencio y tomó la mano de Jiang Sese con suavidad.

Fang Yuchen no se sorprendió por ello, y se limitó a bajar la mirada y reírse amargamente. “No me sorprende que la Tía nunca nos haya mencionado”.

Solo dijo esto y no ofreció ninguna explicación adicional.

Jiang Sese no siguió adelante y preguntó directamente. “¿Qué asunto importante te trae aquí para buscar a mi madre?”.

Fang Yuchen frunció ligeramente los labios. “Es algo muy importante…”.

Acompañado de su cálida voz, a Jiang Sese le contaron una historia de hace mucho tiempo.

Cuando el amor de Fang Xueman acababa de despertarse, había conocido al ambicioso y entusiasta Jiang Zhen, que acababa de entrar en la sociedad.

El amor de la joven era puro e ingenuo. Cuando se conocieron, fue amor a primera vista y pronto entraron en un periodo de cortejo.

Sin embargo, Fang Xueman no se atrevió a dejar que su padre, el Viejo Fang, se enterara de esto.

Ello se debía a que el Viejo Fang no les permitía salir, dadas las circunstancias de Jiang Zhen en ese momento.

Hasta que llegó el día en que alguien llamó a su puerta para ofrecerse a encontrar una pareja para Fang Xueman.

El Viejo Fang vio que la familia de la posible pareja no era mala y aceptó inmediatamente.

Cuando Fang Xueman se enteró de esto, definitivamente no pudo aceptarlo. En el calor del momento, llevó a Jiang Zhen a la casa Fang.

Entonces amenazó con que no se casaría con nadie más que con Jiang Zhen.

“Tú, tú... pasé por tanto dolor para criarte, ¿y ahora te atreves a desafiarme por un chico?”.

El Viejo Fang no se contuvo entonces. “Dime, ¿serás feliz con un mendigo inútil como éste? ¿Eh?”.

Fang Xueman era una hija obediente durante veintitantos años. Sin embargo, esta vez se puso firme y dijo que quería estar con Jiang Zhen.

Estaba decidida y se negaba a echarse atrás: “¡Papá, lo amo! Jiang Zhen lo logrará en el futuro, no puedes separarnos”.

Su mujer ya había declarado su postura, y como hombre Jiang Zhen naturalmente tuvo que añadir con confianza y máxima sinceridad: “Señor, la haré feliz. Por favor, no nos separe”.

Al oír esto, Jiang Sese frunció los labios y dijo confundida. “Entonces, estás aquí para…”.

“La tía es la hija más querida del anciano, y es por amor que está tan decepcionado con ella y se niega a retroceder. Sin embargo, durante estos últimos años, el abuelo ha estado mencionando a la Tía con frecuencia en casa”.

Fang Yuchen dejó su taza y miró a Jiang Sese con nerviosismo: “Últimamente, la salud del Abuelo ha ido decayendo. A él... le gustaría volver a ver a la Tía”.

La Familia Fang era el hogar original de Fang Xueman, pero había estado sola fuera de casa durante mucho tiempo, sin tener noticias de ella durante tantos años.

Fang Yuchen tampoco sabía si Fang Xueman le guardaba rencor en su corazón, y si se iría con él a la casa Fang.

Jiang Sese solo sabía que su madre había experimentado tales cosas después de escuchar la historia de Fang Yuchen.

Bajó la mirada. “Lo siento mucho, mi madre fue hospitalizada recientemente. Es posible que no pueda volver durante un tiempo”.

Las cosas habían sucedido hace tanto tiempo, que pensó que su madre lo había olvidado.

Sin embargo, el estado de su madre ahora... no le facilitaría las cosas para volver.

Fan Yuchen preguntó con ansiedad. “¿Qué le pasa a la Tía?”.

Jiang Sese reunió sus pensamientos y describió a grandes rasgos el orden de las cosas.

Fang Yuchen guardó silencio durante un rato y su expresión se ensombreció también, como si estuviera preocupado. “No pensé que algo así fuera a suceder”.

Hizo una pausa por un momento antes de decir con vacilación. “¿Puedo verla?”.

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