Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma romance Capítulo 947

Esa noche, Jin Fengchen recibió el informe de Mo Xie.

Cuando lo abrió para echarle un vistazo, frunció el ceño.

Acababa de terminar de leerlo cuando Mo Xie lo llamó.

“Joven Amo, ¿ha visto el informe?”.

“Sí”.

“El medicamento que Han Yu y yo desarrollamos, así como el que usted trajo la última vez, habían conseguido frenar temporalmente el funcionamiento del patógeno. Sin embargo, el informe de hoy muestra claramente que está más activo que antes. Es posible que los medicamentos no puedan suprimirlo por mucho tiempo”.

Jin Fengchen agarró con más fuerza su celular y dijo en voz baja: “¿Está relacionado con el desmayo?”.

“Probablemente. Es un efecto secundario de los medicamentos que combaten el patógeno”.

“¿Cuánto tiempo nos queda?”.

“Eso no está claro en este momento. Todo lo que podemos hacer ahora es seguir tomando los medicamentos a tiempo. Han Yu y yo aumentaremos nuestra velocidad de investigación”.

“¿Siguen siendo útiles los medicamentos?”.

Hubo un silencio al otro lado durante un rato. “Joven Amo, Han Yu y yo queremos aumentar la dosis...”.

Jin Fengchen frunció profundamente el ceño al instante al escuchar eso. “¿Será su cuerpo capaz de soportarlo si aumentamos la dosis?”.

“Tendremos que hacerlo de forma incremental, si no ella será incapaz de soportarlo”.

“¿No hay otra manera?”.

Jin Fengchen estaba preocupado. Dada la condición física actual de Jiang Sese, ella podría ser incapaz de soportarlo si la dosis de las drogas fuera a aumentar.

“Joven Amo, lo siento”.

Después de que Mo Xie hablara, su corazón se atascó en su garganta. Como investigador que era incapaz de proporcionar resultados, el Joven Amo seguramente estaba lívido.

Inesperadamente, Jin Fengchen solo dijo: “De acuerdo”, antes de colgar.

¿¡El Joven Amo no estaba enfadado?!

Mo Xie se quedó boquiabierto.

Han Yu se acercó para ver a Mo Xie sosteniendo su celular con una mirada tonta. No pudo evitar darle una palmada en el hombro. “¿En qué estás pensando?”.

Mo Xie dio un respingo asustado y se giró para mirarlo antes de respirar profundamente. “En nada. Solo estoy pensando que tenemos que acelerar el ritmo de nuestra investigación. A la Joven Señora no le queda mucho tiempo”.

“Soy consciente de ello, pero no tenemos ninguna pista, ¿cómo podemos acelerar el ritmo?”.

El patógeno daba miedo no porque fuera perjudicial para las funciones del cuerpo, sino porque era muy complejo. Sería imposible erradicarlo con un solo medicamento.

“Vamos a encontrar una manera”.

La verdad es que Mo Xie también estaba en un callejón sin salida. Lo único que podían hacer ahora era seguir realizando experimentos y confiar en que habría un avance.

...

Jin Fengchen fue a la habitación de los niños.

Jiang Sese estaba leyéndole un cuento a los dos niños.

Desde que Tiantian se había enfermado, se había apegado mucho a Jiang Sese.

En ese momento, ella estaba acurrucada en los brazos de Jiang Sese.

“Tiantian, ven con papi”. Jin Fengchen estaba preocupado porque Jiang Sese estaba cansada, y extendió la mano para cargar a Tiantian.

Sin embargo, Tiantian se apartó de inmediato y lo rechazó tajantemente. “¡No!”.

Jiang Sese se rio. “¿Ves eso? No pasas suficiente tiempo con ellos, así que ya no te quieren”.

Ella lo había dicho en broma.

Sin embargo, Jin Fengchen se lo tomó en serio.

Él frunció el ceño y mantuvo sus ojos fijos en Tiantian.

La niña seguía sin querer mirarlo.

Eso lo hizo sentirse como un fracasado, sintió malestar en su corazón.

“Papá, ¿por qué no nos cuentas un cuento?”, dijo Xiaobao de repente.

Jin Fengchen se giró para mirar. Se encontró con los ojos atentos de Xiaobao, y sonrió imperceptiblemente. “De acuerdo”.

Sabía que Xiaobao lo estaba ayudando.

Jin Fengchen contaba las historias de una manera diferente a la de Jiang Sese. Imitaba las voces de los personajes de la historia. Era muy entretenido y divertía mucho a Xiaobao.

También llamó la atención de Tiantian, que al principio lo ignoraba. Lo miró, con sus grandes ojos parpadeando.

Jin Fengchen la miró y la sonrisa de su rostro se amplió.