Resumo do capítulo Capítulo 953 Juramento de Bebé adorable en la puerta: Mami, por favor firma
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La espaciosa sala de reuniones estaba en silencio, y el ambiente estaba reprimido.
Jin Fengchen estaba sentado sin decir nada. Sin embargo, su imponente aura seguía siendo palpable.
Incluso los directores que lo habían visto todo estaban llenos de aprensión.
Fang Yuchen miró a su alrededor antes de aclararse la garganta ligeramente. “Todos, el Presidente Jin está aquí para asistir a nuestra reunión de hoy. Si alguno de ustedes tiene alguna opinión sobre el asunto, puede hablar ahora”.
Todos los directores se miraron entre sí antes de bajar la cabeza y guardar silencio.
Fang Yiming sonrió cínicamente al ver eso. Qué montón de viejos inútiles.
Él se giró para mirar a Fang Cheng, que captó su significado y se puso en pie.
“Yuchen, esta es una reunión del Grupo Fang. Se trata de nuestros secretos comerciales. ¿No sería inapropiado que el Presidente Jin participara?”.
Fang Yanxin miró a Fang Cheng y sonrió. “Tío Mayor, ¿no estás siendo un poco inapropiado? El Presidente Jin es básicamente de la familia”.
Fang Cheng y Fang Yiming no esperaban que Fang Yanxin hablara en nombre de Jin Fengchen. Sus expresiones cambiaron.
Fang Yanxin continuó. “Supongo que no saben que el tema principal de esta reunión es discutir nuestra colaboración con el Grupo Jin. Es razonable que el Presidente Jin esté aquí”.
¿La colaboración con el Grupo Jin?
Fang Cheng y Fang Yiming estaban muy sorprendidos. Sin embargo, no lo mostraron en su rostro.
Fang Yiming sonrió. “Ya veo. Mi padre debe haber entendido mal”.
Solo un malentendido.
Estaban usando una forma tan simple para disfrazar sus intenciones originales.
Él no los dejaría salirse con la suya.
“Hermano, no creo que el Tío Mayor haya entendido mal. Está claro que tiene su opinión sobre el Presidente Jin”. Fang Yanxin tenía una sonrisa en su cara, pero le dio escalofríos a todos.
“Estás pensando demasiado. Mi papá solo se equivocó”. La sonrisa de Fang Yiming se desvaneció y miró con frialdad a Fang Yanxin. Luego le dijo a Fang Yuchen: “No tenemos opiniones. Procedamos”.
Fang Yuchen los miró y no dijo nada más. Inmediatamente llamó al orden a la reunión.
Tal y como dijo Fang Yanxin, la reunión estaba relacionada con su asociación con el Grupo Jin.
Fang Yuchen comentó que el objetivo del Grupo Fang en el próximo trimestre sería trabajar con el Grupo Jin para establecer una empresa de biotecnología. La empresa se centraría en el desarrollo de productos biológicos.
Los ojos de los directores se iluminaron al oír eso. Tenían grandes esperanzas.
Sin embargo, Fang Yanxin, quien había defendido a Fang Yuchen hace un momento, planteó algunas dudas.
“Ahora hay muchas empresas de biotecnología. ¿Crees que podemos destacar entre la competencia?”.
Fang Yuchen sonrió sin ganas. “Toda inversión conlleva un riesgo. Además, desde que decidí trabajar con el Grupo Jin, cargaré con toda la responsabilidad que conlleva”.
Es decir, si la colaboración tenía éxito, se llevarían todos los dividendos.
Sin embargo, si fracasaba, Fang Yuchen cargaría con toda la culpa.
Nadie rechazaría un trato tan bueno.
Fang Cheng y Fang Yiming intercambiaron miradas, con un brillo en sus ojos.
“Todavía no te creo”, dijo Fang Cheng.
Fang Yuchen lo miró. “Entonces, Tío Mayor, ¿cómo puedo hacer que me creas?”.
“Firma un juramento”.
“¿Un juramento?”.
“Así es. Si fallas, renunciarás a tu puesto de Presidente”.
Aquellas palabras escandalizaron a todos los demás.
“Patear a alguien cuando está en el suelo, ¿no es así, Tío Mayor?”. A pesar de sus palabras, Fang Yanxin en realidad estaba muy contento.
Si Fang Yuchen realmente firmaba el juramento, cuando fallara, tendría que renunciar del Grupo Fang. Esa sería su oportunidad.
Todos pensaron que Fang Yuchen se negaría, pero simplemente aceptó.
“De acuerdo, lo haré”.
“Fengchen, ¿crees que hice lo correcto al firmar ese juramento?”.
“¿Habría alguna diferencia si no lo hicieras?”, preguntó Jin Fengchen en respuesta.
Fang Yuchen se rio. “No. Independientemente de que lo firmara o no, no me dejarían libre de culpa. Por eso decidí firmarlo. En cualquier caso, no hay pérdida para mí”.
“Es bueno tener confianza”. Jin Fengchen se acercó y se sentó antes de mirarlo. “Los dejaré a ti y a Gu Nian las discusiones sobre los detalles de la empresa”.
“De acuerdo”.
Fang Yuchen se lo pensó un momento antes de preguntar: “Fengchen, mañana por la noche hay una gala benéfica. ¿Te gustaría llevar a Sese?”.
“No”. Jin Fengchen rechazó.
Él había venido a la capital para estar con Jiang Sese. No tenía intención de involucrarse en los círculos sociales de la capital.
“En realidad...”. Fang Yuchen tomó asiento frente a él y dudó. “Me gustaría aprovechar la oportunidad para presentar a Sese a todos. Ella es miembro de la familia Fang”.
Jin Fengchen lo pensó un momento y asintió. “De acuerdo entonces, volveré y se lo diré a Sese. Si ella está de acuerdo, iremos. Si no, entonces no”.
“Gracias, Fengchen”.
La verdad era que Fang Yuchen tenía algún motivo oculto. Quería que todos supieran que el Grupo Fang y el Grupo Jin estaban trabajando juntos. Eso sería muy beneficioso para él en el mercado.
Jin Fengchen no se quedó mucho tiempo en el Grupo Fang. Se marchó poco después.
Cuando volvió a la residencia Fang, se topó con Shang Ying y Jiang Sese, que estaban a punto de salir.
“Has vuelto”. Jiang Sese lo miró sorprendido.
“Sí”. Jin Fengchen miró las fiambreras en sus manos. “Te llevaré al hospital”.
“No has almorzado, ¿verdad? Entra y come. Podemos ir solas”, dijo Shang Ying.
“Está bien, no tengo hambre”.
Jin Fengchen cogió las cosas que ella llevaba en la mano y se dio la vuelta para salir.
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