Em geral, gosto muito do gênero de histórias como Borracho y Atrevido: ¡Besé a un Magnate!, então leio muito o livro. Agora vem Capítulo 211 com muitos detalhes do livro. Não consigo parar de ler! Leia a história de Borracho y Atrevido: ¡Besé a un Magnate! Capítulo 211 hoje. ^^
David dijo en voz baja: —Al ir directo hacia ella se asustará de nuevo.
—...¿Asustada de qué?
—No lo entiendes.
Teodoro admitió que en realidad no entendía.
Ambos conducían por la ciudad a mitad de la noche sin poder dormir, siguiéndose el uno al otro sin ser descubiertos... ¿estaban como tontos jugando al escondite?
David observó el auto a lo lejos durante mucho tiempo, sacó su celular y revisó atento los lugares por donde ella había pasado, notando que había farmacias cerca.
De pronto, lo entendió.
Buscó un número en la agenda y llamó.
Viviana, apoyada con dolor en el volante, casi se había quedado dormida.
Se despertó medio dormida y condujo de regreso al apartamento.
Al bajar del auto y dirigirse al control de acceso, vio desde lejos a un hombre alto y guapo vestido con una camiseta y jeans negros, sosteniendo una caja grande.
—¿Teo? —exclamó algo sorprendida,— ¿A esta hora, tú... esto es...?
—Vine a traerle medicinas a Enrique. —respondió Teodoro.
—¿Qué le pasó a Enrique?
Viviana observó asombrada la gran caja. ¿Todo eso era medicina para Enrique?
—No es nada grave, solo son medicamentos básicos y rutinarios. Es un hombre mayor y su salud no es buena, los necesita.
—Ahh… ya veo, ¿y no podía esperar hasta mañana? —miró la hora, casi eran las dos de la madrugada.
—Se me ocurrió de repente.
—...
Eso era... algo repentino.
Entraron juntos.
En el ascensor, Teodoro preguntó con algo de urgencia: —Viviana, ¿por qué saliste tan tarde? ¿Fuiste a comprar algo?
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: Borracho y Atrevido: ¡Besé a un Magnate!