¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1078

¿Cómo podría esta mujer permitirle ser el papi de Bebé Zetty cuando había usado todos sus trucos y planes con él?

¡Bebé Zetty era la hija de su prima!

Angeline estuvo de acuerdo de inmediato. “Seguro”.

Jay replicó: “¿Hay algún problema con tu cerebro?”.

Angeline, desconcertada, preguntó: “¿Hay algo malo con mi cerebro?”.

¡Él era el papá de Bebé Zetty, después de todo! ¿Qué hay de malo con eso?

Jay siseó. “Debes tener un problema mental”.

Si le gustaba tanto, ¿por qué aceptó dejarlo ser el padre de la hija de otra mujer?

Angeline se rascó la parte de atrás de la cabeza, y cuando finalmente entendió el significado detrás de sus palabras, rápidamente señaló a Bebé Zetty con los ojos. “De ninguna manera, Bebé Zetty. El Sr. Ben será mi esposo en el futuro. Solo puedes llamarlo Tío Ben”.

Después de recibir el mensaje secreto que le envió su mami, Bebé Zetty puso deliberadamente una mirada de lástima. “¿Oh? ¡Entonces es una lástima!”.

Jay miró a Angeline, perplejo. “¿Quién dice que voy a ser tu marido?”.

Angeline dijo con confianza: “Estuviste de acuerdo en dejar que te persiguiera, ¿no es así?”.

“¿Cuándo acepté?”.

“Hoy en mi oficina a las catorce y treinta y siete”.

Bebé Zetty se rio disimuladamente. “Guau, eso se traduce en te amo para siempre en inglés, ¿verdad?”.

Angeline palmeó a su hija en la cabeza y le dio un pulgar hacia arriba. “Inteligente”.

Jay estaba exasperado. “No estuve de acuerdo”.

Angeline replicó: “Pero tampoco te negaste”.

Jay: “...”.

Esta mujer se estaba aprovechando de él nuevamente.

Jay miró a Angeline sin palabras, luego le recordó con una mirada severa en su rostro: “No malgastes tu energía. No ganarás un lugar en mi corazón”.

Angeline, sin embargo, se dio unas palmaditas en el pecho y juró: “No hay ningún hombre cuyo corazón no pueda ganar en este mundo, solo hombres a los que quiero conquistar o no”.

“Creo que necesitas saber que tengo amnesia. No sé nada sobre mi pasado, pero eso no significa que no tenga uno”.

Angeline asintió. “Eso lo sé”.

Jay continuó: “Entonces, ¿estás segura de que no hay nada malo en tu cabeza? Ya que tengo un pasado, entonces tal vez tenga una esposa o incluso hijos”.

“¿Estás segura de que todavía quieres perseguirme?”.

“Por supuesto", respondió Angeline con determinación.

La piel de Jay se puso horrible. ¿No iba ella a reflexionar sobre eso en absoluto?

“Perseguir a un hombre como yo podría traerte problemas interminables en el futuro. ¿No tienes miedo en absoluto?”.

“No estoy asustada”.

Cuanto más decidida sonaba, más sentía él como si ella respondiera por impulso.

No había forma de que continuaran con la conversación.

“Ahora que te he devuelto a Bebé Zetty, es hora de que me vaya”. Jay se dio la vuelta y se alejó.