¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1475

"¡El Tío Zechariah se ha salvado!". Los aldeanos de la fortaleza aplaudieron.

Cole y Carson se miraron, y Carson preguntó sorprendido: "¿Podría ser un genio médico?".

Cuando Zayne ayudó a Angeline a ir hasta la habitación de invitados, Cole parecía un poco confundido al verlos. "¿Ustedes tendrán alguna manera de salvar al Tío Zechariah?".

Zayne sonrió torpemente. "No. Pero si no lo hubiera dicho, no hubiéramos podido entrar".

El rostro de Carson se tornó sombrío mientras murmuraba en voz baja: "Quisiera ahogarlo hasta la muerte".

Cole susurró: "Estoy de acuerdo, pero tendrás que hacerlo a espaldas de Angeline".

Cuando Angeline entró en la habitación de invitados, no vio a Jay ni a Bebé Robbie. Su rostro parecía perdido. Cuando vio a Zechariah tumbado en el sofá, su rostro se hundió al instante. Angeline estaba aún más asustada y pálida.

Cole vio el pánico en el rostro de Angeline y supo que estaba mal de salud, por lo que no quiso que sufriera una conmoción. Entonces, dijo con una expresión sombría: "Que salgan".

Angeline se acercó a Cole y preguntó débilmente: "¿Dónde está tu primo?".

Cole se sintió algo asfixiado.

Había utilizado sus formas más humildes para amar a Angeline en silencio. Se estaba volviendo loco en su corazón, pero en la superficie, tenía que actuar como si hiciera la vista gorda con ella.

Era la única manera de no crearle más problemas.

Sin embargo, Angeline siempre era cruel con él. Nunca había intentado ocultar su preocupación por Jay delante de él.

"Está con Judy", respondió Cole en voz baja.

Angeline se quedó atónita. Sus pupilas redondas y negras se congelaron mientras la irritación se desbordaba lentamente de sus ojos.

"¿Qué están tramando?".

"Están siguiendo al asesino".

Angeline escuchó esto y se dio la vuelta para salir.

En ese momento había centrado toda su atención en la inmensa oscuridad. Su aguda intuición le decía que lo estaban siguiendo.

Esa persona estaba rondando a su alrededor, y su habilidad era aún inconmensurable.

Para proteger a Judy y no alertar inadvertidamente al enemigo, Jay consintió a regañadientes en permitirle acercarse a él.

"Jay Ares, estás muerto. ¿Cómo te atreves a tener una cita con otra mujer a espaldas de mi hermana? Ahora mismo me estás decepcionando de verdad".

De repente, escuchó la voz de Zayne sonando desde atrás.

Jay se dio la vuelta y vio a Zayne de pie no muy lejos de ellos, mirándole con enfado.

A su lado estaba Angeline.

Angeline llevaba un vestido blanco ondeante mientras su pelo negro fluía con el viento libremente. Su rostro parecía pálido como el papel, y debido a su frágil cuerpo, parecía un fantasma de pie desde lejos.

"¿Angeline?". El rostro apuesto de Jay palideció de miedo.