¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 167

Jay se acercó a Rose y vio a varios jóvenes nobles a su alrededor. Estaban llenos de elogios para Rose.

"La señorita Loyle no sólo es hermosa, sino que también baila bien. Me pregunto en qué universidad estudió. Debe ser una de las mejores universidades del país, ¿verdad?".

Jay se detuvo para mirar a Rose con el ceño ligeramente fruncido. Hasta donde él sabía, el título de Rose era de bajo rango: simplemente era de una insignificante universidad de tercer nivel.

El hombre que le hizo la pregunta era el hermano de Nancy, Gale Bell. Estaba tratando de avergonzar a Rose.

Jay dudaba si ayudar a Rose o no, pero Rose sonrió y respondió con calma, "Escuché que el Joven Amo Bell también era un estudiante con malas calificaciones en la escuela secundaria, lo que hizo que todos los maestros tuvieran dolores de cabeza. Sin embargo, el Joven Amo Bell se fue al extranjero a reforzarse durante unos años y volvió de buen humor. El Joven Amo Bell y yo tenemos la misma experiencia en nuestro proceso de estudio. No le dabamos importancia a nuestros estudios aquí. Solo cuando fuimos al extranjero nos dimos cuenta de que las cosas en un país extranjero no son tan fáciles como lo son en casa, así que trabajamos ardua y diligentemente y logramos algunos avances".

Ella solo dijo unas pocas palabras, pero explicó su antigua ignorancia y la causa y efecto de su florecimiento en ese momento.

Gale Bell cerró la boca con mal humor.

Jay miró a Rose y se preguntó cuántos secretos escondía la mujer de aspecto mediocre.

Los otros hombres vieron a Jay caminando hacia Rose y se dispersaron.

Rose miró a Jay que estaba parado frente a ella. Ella se sorprendió y lo miró estupefacta.

Jay posó sus ojos de halcón en el vestido de encaje rojo llameante de Rose. Todavía no podía creer que ambos hubieran elegido vestirse de rojo ese día.

Prefería creer que era su plan.

Rose pudo ver a través de sus ojos helados que estaba molesto porque ellos usaban el mismo color y se puso de pie. Tartamudeó, "Señor Ares, es hora de que vuelva a casa. Los niños se lo están pasando bien. ¿Puede llevarlos a casa más tarde, por favor?".

Con eso, Rose estuvo a punto de huir.

La presión de él envolvió a Rose en un abrazo sofocante. Rose inconscientemente se inclinó hacia atrás, tratando de alejarse de él.

Sin embargo, cuando ella se alejó, él se acercó aún más.

El cuerpo de Rose estaba doblado hacia atrás en un arco. Ella estaba a punto de caer, pero él siguió presionándola. Rose tuvo que poner su mano sobre su pecho y empujarlo.

Al final, las manos de Jay se presionaron contra la mesa mientras Rose estaba encerrada entre sus largos brazos. El gesto la hizo sonrojarse y los latidos de su corazón se descontrolaron en el pequeño espacio.

Mucha gente dio miradas significativas en su dirección. Las mujeres apretaron los dientes con envidia.

Rose se sonrojó de vergüenza. "Señor Ares, por favor compórtese".

El desprecio apareció en los ojos de Jay. "No te hagas la difícil, Rose. No funciona conmigo".