¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 1722

A juzgar por la reacción algo avergonzada de la Hermana Dos, Angeline pudo sentir cierta impotencia en ella. Podía ver que la niña les había ocultado su pasado.

La Hermana Dos rompió a llorar y dijo: “Crecí en un orfanato… Mis padres me abandonaron justo después de nacer. Luego, robé algo de la tienda de comestibles y la gente me perseguía. Fue entonces cuando mi Padre adoptivo me vio. Me adoptó después de verme correr muy rápido”.

Angeline se acercó y abrazó gentilmente a la Hermana Dos.

La Hermana Dos simplemente les explicó con muy pocas palabras, pero expresó vívidamente la tristeza y el desamparo en la primera mitad de su vida.

Angeline sintió pena por la niña y dijo con lágrimas en los ojos: “A partir de ahora, te quedarás a mi lado. Nadie más podrá intimidarte. Ahora eres la hija mayor de la familia Ares”.

Jay agregó: “Cambiaremos tu nombre por Andy Ares. ¿Qué te parece?”.

La Hermana Dos se secó las lágrimas y sonrió.

“Está bien, me gusta”.

Angeline explicó: “Cuando Papi te estaba dando un nombre, esperaba que fueras Andy, que podrá seguir vistiendo ropa masculina como desees en el futuro y no cambiará quién eres. Y que tu gracia podrá superar a cualquiera de los otros hombres”.

“Bien”.

Las otras niñas se acercaron a Jay. “Papi, también queremos un nombre hermoso como la Hermana Andy”.

Jay respondió: “Todas tienen uno”.

Angeline explicó: “Papá ya pensó en nuevos nombres para todas ustedes mientras estábamos en Monte Perla”.

Angeline dijo: "Tres se llama Lilynn Ares. El nombre de Cuatro es Susan Ares. El nombre de Seis es Roxie Ares. El nombre de Siete es Chancy Ares. El nombre de Ocho es Quinn Ares. El nombre de Pequeña Díez es Brooke Ares. La Pequeña Once es Demi Ares. Pequeña Doce es Darra Ares, y por último, pero no menos importante, Trece es Enya Ares. Papi les dio los nombres a las hermanas mayores en función de sus personalidades. Dado que las hermanas menores aún son jóvenes, todos sus nombres simbolizan algo pequeño pero grandioso. Espero que todos los hermanos y hermanas mayores las protejan”.

“¡Me gusta mi nombre!”, las niñas empezaron a llorar pero estaban emocionadas al mismo tiempo.

La Hermana Seis dijo: “Roxie Ares, ¿como en el amanecer en Persa?”.

Jenson había nacido con fuertes deseos de proteger a los débiles. Para todas las niñas de la familia Ares, siempre que fueran niñas a las que papi aceptara y mami amara, él sentiría que tenía la obligación de protegerlas. Él dijo con frialdad: “Será mejor así”.

Bebé Robbie sacó la lengua. “Nadie me ayudará a luchar en el futuro”.

Angeline se atragantó mientras señalaba a Bebé Robbie, regañándolo, “Eres un mocoso apestoso. Si tienes que pelear en el futuro, estarás solo. No arrastres a tus hermanas contigo. Las hijas de la familia Ares caminarán por un camino más suave a partir de ahora”.

Bebé Robbie de repente sintió que todo se había vuelto mucho menos interesante.

Josephine y Zayne acababan de entrar en Jardín Alegre cuando escucharon los gemidos y sollozos que venían del interior de la casa. Sonaba fuerte e incesante; incluso el suelo estaba temblando.

“Mi*rda, ¿qué está pasando?”, Zayne entró en pánico. Abrió la puerta del coche y corrió hacia la entrada de la villa.

Josie estaba tan aterrorizada que ambas piernas se debilitaron.

Pensó en Jay estando gravemente enfermo y luego, en combinación con los gritos miserables de Angeline, su imaginación se dirigió hacia el peor de los casos.