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Angeline dijo algo decepcionada: “La verdad, siempre esperé que tú y la Hermana Shirley terminaran juntos. No solo porque tienen un hijo juntos, sino porque a ella realmente le gustas. Siempre tendrás un lugar especial en su corazón, y ahora que ustedes dos se están separando, siento que es una gran lástima”.
Jay abrazó a Angeline y le dijo: “No estés triste, Angeline. Tantas personas en este mundo se separan casi todos los días, pero puedes estar segura de que Jaybie y tú nunca se separaran”.
Después, él miró a Cole engreídamente y dijo con algún significado oculto de por medio: “Siempre te protegeré y nunca permitiré que nadie se interponga entre nosotros”.
Cole lo miró sorprendido y dijo: “Simplemente no te soporto. Deja de intentar lanzarme indirectas tan frecuentemente”.
Jay dijo: “No estaba haciendo eso en absoluto. Deja de suponer cosas por tu cuenta”.
Cole estaba tan enfadado que dejó de responderle a Jay.
Sin embargo, Jay continuó echando más leña al fuego y dijo: “La Hermana Shirley y Francis se van a casar ahora, así que estás intentando quitarle la custodia de Dawn. Pero, ¿cómo piensas hacerlo? La Hermana Shirley ya no es la antigua Shirley Severe. Ahora ella es la presidenta de las Empresas Severe y tiene los recursos para criar a Dawn. Por el contrario, tú tienes mucha riqueza como el joven amo de la familia Yorks, pero ¿te atreves a revelar la riqueza de tu familia en la corte? No te atreverías. Por lo tanto, a los ojos de la ley, no eres más que un parásito que no tiene trabajo ni ingresos y que sigue viviendo con el apoyo de sus padres. Así que en cuanto a la batalla por la custodia, no es necesario que la lleves a la corte. Ya sé que perderás”.
Lo que Jay dijo podría ser desagradable de escuchar, pero era lógico. Sin embargo, Cole estaba decidido a ganar también, diciendo: “No me importa lo que pase. No le entregaré a Dawn a Shirley, y mucho menos permitiré que él le llame a otro hombre papi. Lucharé por la custodia de Dawn cueste lo que cueste”.
La determinación de Cole de no escatimar ni un solo costo para ganar esto, estaba haciendo que Angeline se sintiera inquieta.
Aunque los Severe tenían ahora un gran negocio, ¿cómo podrían luchar contra los métodos más o menos oscuros e ilegales de los Yorks?
Cole procedió a suplicarle a Angeline: “Angeline, la única persona que me preocupa tras dejar la Capital Imperial es Dawn. Sé muy bien que los niños que se incorporan a una nueva familia vivirán la mayor parte de su vida de manera pesimista o depresiva. Así que te pido que cuides de mi hijo por mi bien”.
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