¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 2444

El grupo de personas caminó por el camino de la montaña y finalmente llegó a la Fortaleza Yorks.

Era lógico que cuando Cole Yorks, el Joven Amo de la Fortaleza Yorks, volviera a casa, debía recibir una cálida bienvenida de los aldeanos de la Fortaleza Yorks. Sin embargo, al contrario, todo el lugar estaba terriblemente desierto. El paisaje seguía siendo el mismo, y también había edificios alrededor. Sin embargo, no había señales de vida.

Cole y Jay se miraron, y luego se fueron apresuradamente hacia la casa que tenían frente a ellos.

Cuando entraron a la casa, escucharon por casualidad el crujido de una puerta. Varios de ellos se detuvieron y miraron en silencio a la persona que la abrió.

Entonces, vieron entrar a un hombre mayor. Cole lo llamó: “¿Tío?”.

Sin embargo, el hombre parecía no escuchar su voz y seguía caminando hacia delante.

“¿Es sordo?”, preguntó Josie.

Cole estaba incrédulo. “La audición del Tío siempre ha sido muy buena”.

Jay fijó su mirada en el anciano. Al ver la lentitud de sus movimientos, Jay especuló: “Creo que se ha quedado sordo y ciego. Cole, sube y pregúntale dónde se ha metido la gente de la Fortaleza Yorks”.

Cole dio un paso adelante y se quedó quieto frente al anciano. Sin embargo, se dio cuenta de que los ojos del anciano no podían enfocarlo. Cole procedió a agitar la mano frente a él, pero éste no reaccionó en lo más mínimo. Siguió haciendo lo suyo lentamente.

En ese momento, Cole le llamó en voz alta: “¡Tío! ¡¿Puedes verme?!”.

El hombre siguió haciendo lo suyo.

Angeline dijo: “Está verdaderamente sordo y ciego”.

Cole miró al anciano con gran decepción. Sin embargo, al ver que se esforzaba por conseguir agua pero sus manos eran capaces de agarrar con precisión el asa del balde, Cole sintió cierta curiosidad.

Quería tirar de la mano del anciano hacia otro lado para ver su reacción. Inesperadamente, cuando su mano tocó la de él, el rostro de Cole palideció de sorpresa y se tambaleó hacia atrás.

Jay se dio cuenta de algo. Miró a Cole con ojos curiosos, y cuando vio que Cole se sentaba en el suelo asustado, supo que algo raro estaba pasando.

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