¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 248

El Director se sintió un poco más tranquilo. "Tienes razón. El Amo Ares es un hombre de negocios que se preocupa profundamente por las ganancias, es poco probable que se haga enemigo de Empresas Bell por una mujer”.

Volteándose para mirar a Rose Loyle, frunció el ceño al ver el cuerpo inmóvil en el suelo. "Mujeres. Que baja resistencia para el dolor. Échala".

Los guardaespaldas del Director estaban caminando hacia el cuerpo de Rose cuando de repente, las puertas de la oficina del Presidente se abrieron violentamente.

Fue un sonido fuerte que atrajo la atención de todos, haciendo que las cabezas de todos se dirigieran en su dirección con sorpresa.

En la puerta había dos hombres vestidos de negro con gafas de sol. Hombres prometedores, de pie junto a los marcos de las puertas.

Detrás estaba otra figura con la cabeza en alto, entrando en la habitación con un aire de prestigio y autoridad bien manejada.

Al ver su rostro, el Director rápidamente se puso de pie con una sonrisa.

Los delicados rasgos de Nancy Bell florecieron en una encantadora sonrisa también, sus ojos brillaban con una alegría apenas disimulada. Quizás la gran visita de Jay Ares a Empresas Bell era por ella.

Nancy se acercó a él cuidadosamente. "¿Por qué viniste, Amo Ares?".

Jay Ares le lanzó una mirada de desprecio mientras se rozaban los hombros, una llena de tanto instinto asesino e ira que el corazón de Nancy se hundió instintivamente por el miedo.

Inclinándose, un guardaespaldas estaba a punto de sacar a rastras a Rose Loyle, solo para recibir una fuerte patada en su cuerpo por Jay Ares. Como hojas de otoño, se agitó un momento antes de caer justo ante los pies del Presidente Bell.

Con las costillas fracturadas, quedó inerte en el suelo.

"Amo Ares, qué...". El presidente Bell miró confuso a Jay Ares. Su corazón latía incontrolablemente de miedo en ese momento, porque tenía una idea de la razón por la que Jay Ares estaba allí.

Entonces, ¿esta fue la razón detrás de la operación de su Presidente ese día? ¿Un caballero con armadura salvando a la damisela en apuros?

Específicamente, ¿la mujer a la que solía odiar más?

Las palabras de Jay Ares habían dejado a Nancy sumida en un gran estupor, ya que estuvo sentada un buen rato en el suelo, demasiado débil para pararse.

Jay Ares le había dado a Nancy una advertencia antes de irse, un pequeño castigo para disuadirla de una mayor agresión hacia Rose. Ya que su padre sabía de su conspiración contra Rose y Sean, seguramente se enfurecería.

"Nancy, ¿cómo… cómo pudiste conspirar contra tu hermano?". El Presidente tembló de ira, "¡Sin mencionar todos los líos que me causaste hoy! ¡Tú, absoluta—calamidad!”.

Después de haber sido malcriada desde joven, Nancy rompió a llorar ante este sentimiento de maldad que nunca antes había sentido. "¡Nunca tuve la intención de lastimar a Sean, Papá! Yo—yo solo, Rose Loyle destruyó mis oportunidades con el Amo Ares. ¡Solo quería venganza!".