¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 561

Jay se sorprendió mientras miraba a Jordan que tenía un rostro que no cambiaba incluso después de pasar por las vicisitudes de la vida.

Tenían una actitud similar cuando trataban a sus esposas.

De alguna manera, la embarazada Sera había aparecido en la puerta. Se veía nerviosa y tenía los ojos llorosos mientras miraba a Jay como si él fuera su pilar de apoyo.

Chloe se sorprendió cuando vio a Sera. Quizás la apariencia lastimera de Sera la había conmovido, por lo que le suplicó a Jay: "Hijo mío, deja que se quede. Déjala ser mi sirvienta”.

Jordan era un hombre que mimaba a su esposa sin fin. Aunque odiaba a Sera porque sentía que era una mujer que no se respetaba a sí misma, igual apoyó los deseos de Chloe cuando tenía la intención de mantener a Sera. "Jay Ares, ya que a tu madre le agrada, deja que se quede".

"No". Jay fue firme en su respuesta.

Jordan decidió entonces vetar la opinión de Jay. "No olvides que una parte de la Corte de Buque Fragante también es mía. Quiero quedarme con ella".

La expresión de Jay era furiosa. Miró el vientre embarazado de Sera y dijo sin piedad: "Sera Severe, haré los arreglos para que un médico realice una prueba genética para el feto lo antes posible".

Sera palideció en el momento en que escuchó eso, pero escondió bien su expresión nerviosa.

Jay luego se fue, enojado.

Chloe hizo arreglos para que Sera se quedara en la planta baja en una de las habitaciones de los sirvientes, pero Sera no estaba contenta con tal arreglo.

Había pensado que podría mejorar su estilo de vida con su embarazo, pero terminó necesitando atender a Chloe mientras estaba embarazada. Sintió una sensación de discriminación, pero no se atrevió a mostrar abiertamente su disgusto.

Sera tampoco era una mujer ingenua. Después de pensarlo un poco, se dio cuenta de que Jay era un hijo filial. Todo lo que tenía que hacer era ser amable con su futura suegra y obtener su aprobación, entonces quizás Chloe intercedería por ella. De esa manera, Jay la aceptaría lentamente.

"No hables de mi hijo como si fuera tan astuto como tú".

"Sería feliz si él fuera como yo". Jordan hizo un puchero y sonó un poco decepcionado.

Chloe se quedó sin habla.

Si había algo que ella deseaba poder cambiar en su vida, era que Jay no era el hijo de Jordan.

Jordan notó que Chloe no estaba contenta y rápidamente la persuadió diciéndole: “Chloe, no te enojes. Para ser honesto, después de un tiempo interactuando con Jay, me agrada bastante este chico. Es diferente al resto de la familia Ares que son serpientes de dos cabezas. No fue corrompido a pesar de haber crecido en un entorno como este. Me gusta eso”.

Chloe permaneció de mal humor como si estuviera preocupada con algunos pensamientos.