¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 607

Cuando Angeline salió con el vestido negro, la mirada de Jay se posó en ella y nunca la quitó.

Su postura era suave y con gracia.

Parecía elegante y delicada sin esfuerzo.

No pudo equipararla más con Rose debido a esto. Era como la Angeline Severe de los viejos tiempos. Sus ojos eran gentiles como el agua que fluye mientras que su mirada era expresiva, al igual que entonces.

Sin embargo, la máscara azul era incompatible con su elegancia.

"No hace falta que lleves ropa negra", dijo Jay de repente.

Solo llevaba ropa negra para rendir homenaje a sus padres muertos.

Ella definitivamente no tenía ninguna razón para rendirle homenaje a sus asesinos.

Angeline sonrió hasta que sus ojos se curvaron. "Quiero vestirme igual que tú".

Los tres lindos bebés estaban alrededor de la mesa del comedor disfrutando del desayuno preparado por la nutricionista con gusto. Al escuchar las desvergonzadas palabras de Angeline tan repentinamente, Bebé Zetty y Bebé Robbie dejaron inmediatamente a un lado los cubiertos que tenían en sus manos.

Ambos parecían haber perdido el apetito.

"Tía Cómo Sea, ¿por qué no te has ido?", dijo Bebé Zetty con desagrado.

Angeline sacó el libro de preguntas de su espalda como si estuviera haciendo un truco. Luego se dirigió a Bebé Zetty a paso ligero.

"Señorita Bebé Zetty, por favor, compruebe".

Bebé Zetty tomó el libro de preguntas. Cuando vio que todas las respuestas eran casi iguales a las estándar, Bebé Zetty miró a su Papi con enfado. "Papi, ¿por qué la ayudaste?".

Angeline tomó aire y se preguntó en secreto: ‘¿Cómo sabe Bebé Zetty que Jaybie me ayudó?’.

Ella le lanzó su mirada a Jay y se regocijó en su corazón. Por suerte, ayer tomó una medida de precaución con Jaybie y le hizo ponerse en el mismo frente que ella.

Quién lo diría, Jay soltó: "Hizo seis preguntas sola".

Angeline comprendió perfectamente la realidad de que Jay nunca abogaría por ella.

Ella simplemente comenzó a actuar sin vergüenza. "No me voy a ir".

Los ojos almendrados de Bebé Zetty estaban muy abiertos. "¿No te estás comportando descaradamente?".

Angeline dijo con justicia y contundencia: "No me estoy comportando descaradamente. Como mucho, yo... no seré tu tutora, pero sigo siendo la cuidadora de tu papi".

Bebé Zetty estaba muy enfadada. "Papi, mira cómo la Tía Cómo Sea no puede ni siquiera mantener su palabra. No merece ser tu cuidadora".

Jay le lanzó su mirada a Angeline, pero Angeline dirigió a propósito su mirada hacia el otro lado con una mirada de ‘no estoy escuchando’.

Los ojos de Jay se pintaron con una sonrisa.

Antes de que pudiera tomar una decisión, Angeline salió. "Las flores del jardín están marchitas. Voy a regarlas".

Bebé Zetty gritó enfadada: "¡Tía Cómo Sea, mi papi aún no ha dicho cómo te va a castigar!".