¡Buenas noches, Señor Ares! romance Capítulo 650

Resumo de Capítulo 650: ¡Buenas noches, Señor Ares!

Resumo de Capítulo 650 – Uma virada em ¡Buenas noches, Señor Ares! de Internet

Capítulo 650 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de ¡Buenas noches, Señor Ares!, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Romance, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.

Sin palabras, Josephine dijo débilmente: “Eres aún más pervertida que esas escorias”.

“Son tan grandes, incluso estoy celosa”. Angeline molesto a Josephine mientras la ayudaba a vestirse.

“¿Te atreves a mostrarme los tuyos?”, Josephine preguntó.

Angeline se rio mientras decía: “Los mios no son tan grandes como los tuyos”.

“Entonces tienes que hacer que mi hermano trabaje más duro”. Josephine la molestó.

Angeline dijo: “Él ya está trabajando muy duro”.

Josephine puso mala cara. “Rayos, ¿te acabas de reunir con mi hermano y ya te entregaste a él?”.

Angeline dijo malhumorada: “¡¿Cómo te atreves?! Si no fuera por el vino que nos enviaste, esta noche no sería tan vergonzosa. Moleste tanto a tu hermano anoche. No sé cómo lo recompensaré mañana”.

Josephine preguntó, “¿Qué tienes que compensarle? ¿Él está tratando de actuar lamentable a pesar que obtuvo una ganga?”.

Angeline ayudó a Josephine a ponerse de pie. Josephine luego tomó una daga y miró a Hiroshi. “Hiroshi Titus, ¿tengo buena figura, no?”.

Hiroshi casi se orina del miedo. “Señorita Ares, lo siento. Por favor, se lo ruego, por favor perdóneme. Le juro que yo nunca le molestaré de nuevo en el futuro”.

Angeline intercambió una mirada con Josephine. De manera interrogatoria, ella le dijo a Hiroshi: “Podemos dejarte ir, pero debes ser honesto. ¿Quién te dijo que hicieras esto? ¿Quién te ayudó a entrar a la Cabaña Luna Voladora?”.

Una expresión indescifrable apareció en la cara de Hiroshi.

Josephine puso su pie en la entrepierna de Hiroshi. “Si no me dices, te dejo inservible”.

Fue algo bueno que sus fuerzas no habían retornado completamente todavía, si no Hiroshi estaría acabado.

Sin embargo, Hiroshi ya estaba petrificado por las acciones de Josephine. Como había sido consentido desde su nacimiento, él le temía al dolor, así que él inmediatamente suplico misericordia.

Josephine se dejó caer sobre su cama, traumatizada.

Angeline la consoló. “Josie, no estés molesta. Solo tienes un par de padres horribles. ¡Yo ya pasé por lo mismo antes!”.

Josephine miró a Angeline y recordó como sus padres se rehusaban a reconocerla cuando era Rose Loyle. En aquel entonces, ella era tan humilde como un pedazo de hierba en la tierra.

Sin embargo, ella era obstinada y nunca se rindió.

Inspirada por Angeline, Josephine se iluminó.

“Hermana Angeline, ¿por qué no duermes conmigo esta noche y tenemos una charla?”.

Angeline se recostó a su lado, totalmente vestida. “Seguro, ¿de qué quieres hablar?”.

“¿Por qué piensas que mi padre nos está atacando a mi hermano y a mí de repente?”.

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: ¡Buenas noches, Señor Ares!