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En pleno vuelo, después de tomar una siesta, el pequeño Lucien, que a pesar de ser un niño de apenas dos años, tenía el porte de su apuesto y genioso padre, se acercó a Angelina, había viajado antes cuando sus abuelos lo llevaban de vacaciones, pero está vez el único que los acompañaba además de las dos azafatas y el piloto, era el asistente Jan Pierre, un eficiente y estudiado inglés de buena figura y angelical rostro
— Mamá, ¿iremos a buscar un papá para mí? uno que se parezca como yo — pedía el adorable y a la vez demandante niño
— ¿Por qué tienes esa obsesión de querer un papá? Lucien, ¿mamá, no es suficiente acaso? ¿no somos felices tú y yo y los abuelos? los papás son como ogros que regañan a los niños cuando hacen travesuras
— Tú también me regañas, no me dejas montar a Jan Pierre, de caballito — la vocecita Infanti de Lucien, era apenas entendible aún era muy pequeño, pero su inteligencia era sorprendente, Angelina, muchas veces se había quedado sin palabras con el comportamiento de su hijo, era mucho más avanzado para un niño de su edad
El apuesto asistente, entrecerró los ojos en dirección al niño, le tenía mucho cariño pero era inegable que era un verdadero diablillo, nunca podías bajar la guardia si estaba cerca de ti — no soy un caballo, Lucien
— Ves mamá, tu asistente no es muy obediente que digamos, se niega a todo lo que le pido, despidelo y contrata a otro asistente que si quiera jugar conmigo
— Jan Pierre, es mi asistente no tuyo, y no es un caballo, él está para ayudar a mami en los negocios de la empresa y asuntos importantes, no para ser tu caballo personal, cuándo crezcas y seas el Ceo de las empresas Di Monti, podrás tener tu propio asistente
— ¿A mi asistente si podré montarlo cómo caballito? mamá — el niño no se daba por vencido
— Cuándo eso pase, Lucien, de lo menos que tendrás tiempo es de jugar a los caballos — la hermosa y joven Ceo, despeinó los cabellos de su ocurrente pequeño
— Mamá, no me despeines, ¿qué no sabes que a las niñas les gustó así? cuando me veo guapo — el niño era tan vanidoso, Angelina, se preguntaba ¿de dónde lo había sacado? ella no era una chica engreída
— Mientras tanto en los Estados Unidos, el joven empresario Lucien, se terminaba de vestir para salir a tomar una copa con su mejor amigo Leron Camel, era uno de los pocos amigos que tenía, a decir verdad el carácter le había empeorado desde su divorcio y no había quien lo soportara
El Ceo Lucien, llegó al exclusivo bar donde su amigo ya lo aguardaba, Leron, le sirvió de la botella de whisky y le entregó el vaso
— ¿Y ahora por qué estás de tan mal humor? parece que este mundo no cumple con las expectativas del excelente Ceo Lucien Black — dijo Leron Camel
— No seas idiota, no vez que estoy de excelente humor hoy, ¿mejor dime para que me querías ver con tanta urgencia? — respondió Lucien, mientras giraba los hielos de su vaso de whisky con su dedo índice
— Disculpa, no noté que estabas de tan excelente humor — Leron, dijo sarcástico, su amigo traía la misma cara de siempre, inexpresiva y aterradora — unas amigas me pidieron que te presentara con ellas, son de buena familia y no son nada feas, pensé que te podría interesar, después de todo en algún momento tienes que volverte a casar y tener un heredero
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